Los bebedores son menos propensos a morir de ataques al corazón.

William J. Cromie

Gran Bretaña.

La gente enferma del corazón que consume un promedio de 14 tragos por semana, parece menos propicia a morir de un ataque al corazón que los no bebedores. Un consumo bajo o moderado de alcohol, también está asociado con un menor riesgo de fallas del corazón entre los ancianos.

Estas son las conclusiones de dos estudios publicados el miércoles, Abril 18, en la revista científica Journal of the American Medical Association.

En el primer estudio, los investigadores revisaron a 1,913 pacientes hospitalizados por ataques al corazón. Después de cuatro años de seguimiento, encontraron que los bebedores moderados tuvieron un riesgo menor de morir del corazón equivalente al 32 por ciento, que aquéllos que no beben nada de alcohol. Los investigadores definieron a los bebedores moderados como los que consumen por lo menos siete o un promedio de 14 tragos de cerveza, vino o licor a la semana.

Los bebedores ligeros, o aquéllos que consumieron menos de siete tragos, obtuvieron un riesgo 21% menor de ataques al corazón, que el de los abstemios. Los resultados fueron similares para ambos, hombres y mujeres.

"Nuestro estudio no responde a la pregunta de si el alcohol es bueno para usted", dice Kenneth Mukamal, un profesor de la Escuela de Medicina de Harvard, quien dirigió el estudio. "[Nuestros] hallazgos son consistentes con un menor riesgo de muerte por el consumo de una cantidad limitada de alcohol, pero no sabemos si la gente que no es bebedora también tendría un menor riesgo de muerte si empezara a beber alcohol".

Ambos artículos y un editorial, en la misma revista advirtió que la gente debe consultar con un médico antes de empezar a beber o a aumentar su consumo a 14 tragos por semana.

Una investigación anterior encontró que beber uno o dos vasos de vino rojo diariamente, da firmeza al corazón. Esto llevó a la creencia de que algún ingrediente en las uvas era el responsable. Pero éste y otros estudios indicaron que es el alcohol, porque la cerveza y el vino ofrecen la misma ventaja.

Mukamal y sus colegas en el Beth Israel Deaconess Medical Center y otros hospitales afiliados a Harvard, en Boston, vigilaron a sus pacientes durante cuatro años, durante los cuales el 17 por ciento de los no bebedores murieron de problemas cardiovasculares, comparados con el 9 por ciento de los bebedores ligeros y 7 por ciento de los bebedores moderados.

Los ancianos también se benefician

El segundo estudio, de acuerdo con sus autores, demuestra que un consumo bajo o moderado de alcohol por los ancianos, está ligado a un riesgo menor de fallas del corazón.

Jerome Abramson de la Emory University School of Medicine, en Atlanta y sus colegas, llegaron a esta conclusión después de un seguimiento durante 14 años, de 2,237 personas con un promedio de edad de 74 años.

Abramson y sus colegas se dieron cuenta de que un consumo fuerte de alcohol puede llevar a una falla del corazón, pero hasta que se realizó este estudio, no era conocida la relación entre consumo moderado de alcohol y falla del corazón. "El presente estudio demuestra por primera vez que el consumo moderado de alcohol está ligado de forma importante con un menor riesgo de falla del corazón", afirmaron.

La cerveza, el vino y el licor "fueron asociados con reducciones similares en fallas del corazón, sugiriendo que es el alcohol puro, no el tipo de bebida, el que está asociado con el menor riesgo de falla del corazón", asentaron los investigadores.

La falla del corazón ocurre cuando las válvulas del corazón se vuelven muy débiles para bombear suficiente sangre al resto del cuerpo. Esto produce fatiga y respiración entrecortada, y es una razón común para que los ancianos sean hospitalizados.

Ambos estudios tomaron en consideración las diferencias de edad, peso, sexo, presión sanguínea, historia de enfermedad del corazón y otros factores entre aquéllos que se incluyeron en la investigación.

Esta investigación se añade a más de otros 70 estudios que proveen evidencia respecto a que beber con moderación reduce las ocasiones de ataques cardíacos y algunos tipos de infarto.

Sin embargo, existe la advertencia de Abramson sobre "que el consumo fuerte de alcohol puede llevar a resultados cardiovasculares negativos, tales como alta presión sanguínea, ataques al corazón y muerte cardiaca repentina". Otros doctores previenen que, beber con moderación puede también provocar riesgos para el colon, para el cáncer en el seno, algunos tipos de infarto, daño fetal, accidentes de tránsito, conducta abusiva y actividades criminales.

FUENTE: Harvard University /Harvard Gazette Archives, April 19, 2001. www.news.harvard.edu/gazette/2001/04.19/04-heartstudy.html