¿Sabías que...?

Última actualización [16/04/2006]



Neuropatía alcohólica




ESTADOS UNIDOS
La neuropatía alcohólica es un trastorno que implica disminución del funcionamiento de los nervios, debido al daño producido por el consumo excesivo de alcohol.

Causas, incidencia y factores de riesgo
La causa de la neuropatía alcohólica es controvertida, pero puede ser el efecto tóxico del alcohol sobre el tejido del nervio. Asimismo, probablemente está asociada con deficiencias alimenticias y se puede confundir con neuropatías relacionadas con la nutrición, tales como el beriberi.

Los síntomas más comunes son entumecimiento, hormigueo, ardor en los pies o debilidad. Sin embargo, en los casos severos, los nervios autónomos (los que regulan las funciones corporales internas) pueden estar comprometidos.

El consumo excesivo y prolongado de alcohol o el alcoholismo presente durante 10 años o más constituye un alto riesgo para adquirir la neuropatía alcohólica.

Síntomas
  • Entumecimiento
  • Sensaciones anormales (parestesia), "sensación de hormigueo"
  • Sensaciones dolorosas
  • Debilidad muscular
  • Calambres o dolores musculares
  • Intolerancia al calor, especialmente después de hacer ejercicio
  • Impotencia en los hombres
  • Dificultad urinaria
    • incontinencia (goteo de la orina)
    • sensación de vaciamiento incompleto de la vejiga
    • dificultad para empezar a orinar
  • Estreñimiento
  • Diarrea
  • Náuseas, vómitos
Los síntomas adicionales que pueden estar asociados con esta enfermedad son:
  • Dificultad para deglutir
  • Deterioro del lenguaje
  • Pérdida de la función muscular o la sensibilidad
  • Contracciones musculares o espasmo
  • Atrofia muscular
  • Movimiento disfuncional
  • Ronquera o cambio de voz
  • Caída del párpado (ptosis)

Nota: los cambios en la fuerza muscular y/o sensibilidad generalmente ocurren en ambos lados del cuerpo y son más comunes en las piernas que en los brazos. Los síntomas se pueden desarrollar en forma gradual y empeorar progresivamente con el paso del tiempo.

Signos y exámenes
El resultado del examen neurológico puede ser anormal. Los reflejos pueden estar reducidos y pueden presentarse anomalías nerviosas localizadas. Los déficits neurológicos por lo general son simétricos (afectan ambos lados del cuerpo).

Se pueden presentar signos de disfunción del sistema nervioso autónomo. El examen de los ojos muestra disminución de la respuesta de la pupila u otra anomalía. La presión sanguínea puede mostrar cambios ortostáticos (caída de la presión cuando la persona se pone de pie).

Se pueden hacer exámenes de laboratorio de acuerdo con los antecedentes, los signos y los síntomas para descartar otras causas posibles de neuropatía.
  • Los estudios nutricionales pueden mostrar deficiencias de tiamina (vitamina B1), piridoxina (vitamina B6), ácido pantoténico y biotina, vitamina B12, ácido fólico, niacina (vitamina B3), vitamina A u otras deficiencias. El alcoholismo es un factor de riesgo para deficiencia nutricional.
  • La química del suero puede mostrar anomalías (ver estudio básico de química sanguínea ).
  • Se pueden utilizar las pruebas de conducción nerviosa y la electromiografía (examen de la actividad eléctrica en los músculos) para determinar el grado del daño neurológico. Igualmente, se puede utilizar biopsia del nervio para descartar otras posibles causas de los signos y síntomas.
  • Un serie del tránsito esofagogastroduodenal puede mostrar disminución de la motilidad, retardo en el vaciamiento del estómago u otras anomalías. Este estudio se puede usar para descartar la obstrucción física como causa de los vómitos u otros síntomas gastrointestinales.
  • La esofagogastroduodenoscopia (EGD) se usa para descartar obstrucción física como causa de síntomas gastrointestinales.
  • Los estudios con isótopos pueden mostrar gastroparesia (disminución de la motilidad gástrica).
  • Un cistouretrograma de evacuación puede mostrar disminución del vaciamiento de la vejiga, causada por el daño de los nervios que la controlan.

Se pueden practicar otros exámenes para determinar la presencia y magnitud de otras pérdidas neurológicas.

Tratamiento
Los objetivos del tratamiento (suponiendo que ya se han tomado medidas para el problema inmediato del alcohol) son, entre otros, controlar los síntomas, maximizar la capacidad para desempeñarse en forma independiente y prevenir lesiones. Es importante suplementar la dieta con vitaminas, incluyendo tiamina y ácido fólico.
Puede ser necesario aplicar fisioterapia y/o usar elementos ortopédicos, tales como férulas, para maximizar la función muscular y para mantener una posición funcional de las extremidades.

Se pueden usar medicamentos, si se necesitan para aliviar el dolor o las sensaciones molestas. La respuesta a estos medicamentos es variable. Se recomienda la mínima cantidad de medicamentos para reducir los síntomas con el fin de disminuir la dependencia y otros efectos secundarios del consumo crónico de éstos.

Los medicamentos comúnmente usados pueden incluir analgésicos de venta libre, tales como la aspirina, ibuprofeno o acetaminofén para calmar el dolor. Los dolores neurálgicos pueden responder a los medicamentos antidepresivos tricíclicos o anticonvulsivantes, tales como fenitoína, gabapentina o carbamazepina.

La posición o el uso de un dispositivo en la cama que impida el roce de las piernas con las frazadas puede reducir el dolor en algunas personas.

Puede ser necesario el tratamiento de la disfunción autónoma (tal como problemas de presión sanguínea, dificultad con la micción y lentitud del movimiento gastrointestinal).

El tratamiento puede ser crónico o a largo plazo y su respuesta es variable.

Se pueden intentar varios tratamientos antes de encontrar uno efectivo en la reducción de los síntomas. Las medidas como usar medias elásticas, aumentar el consumo de sal, dormir con la cabeza elevada o tomar medicamentos tales como fludrocortisona pueden reducir los cambios posturales de la presión sanguínea ( hipotensión ortostática).

Así mismo, la expresión manual de orina, la cateterización intermitente o medicamentos, como el betanecol, pueden ser necesarios para tratar la disfunción de la vejiga.

La impotencia, la diarrea, el estreñimiento u otros síntomas se deben tratar en la medida de lo necesario y es posible que no respondan bien al tratamiento.

Es importante la protección contra las heridas de las extremidades que presentan reducción en la sensibilidad, lo cual puede incluir el control de la temperatura del agua del baño para evitar quemaduras, cambio de calzado, revisión permanente de los zapatos para disminuir las heridas causadas por presión u objetos dentro de los zapatos y otras precauciones. Además, se deben cuidar las extremidades para prevenir heridas por presión.

Se debe suspender el consumo de alcohol para reducir la progresión del daño y el tratamiento del alcoholismo puede comprender intervenciones siquiátricas, apoyo social tal como el de AA (Alcohólicos Anónimos), medicamentos y cambio de comportamiento.
Expectativas (pronóstico
El daño de los nervios por neuropatía alcohólica por lo general es permanente y puede ser progresivo si no se suspende el alcohol. Los síntomas varían de una molestia leve a una discapacidad severa. Esta enfermedad generalmente no representa una amenaza mortal, pero puede comprometer seriamente la calidad de vida.

Complicaciones
  • Discapacidad
  • Incomodidad o dolor crónico
  • Lesiones en las extremidades

Situaciones que requieren asistencia médica
Se debe buscar asistencia médica si se presentan síntomas que pueden indicar neuropatía alcohólica.

Prevención
Se debe evitar o reducir al mínimo el consumo del alcohol. La abstinencia total de alcohol puede ser necesaria para personas alcohólicas.
Actualizado: 7/28/2005

Versión en inglés revisada por: Kevin Sheth, M.D., Department of Neurology, Brigham and Women''s Hospital and Massachusetts General Hospital, Harvard Medical School, Boston, MA. Review provided by VeriMed Healthcare Network.
Traducción y localización realizada por: DrTango, Inc

FUENTE: MedlinePlus Enciclopedia Médica/Servicio de la Biblioteca Nacional de Medicina de EE.UU. y los Instituos Nacionales de la Salud.
http://nlmnih.gov/medlineplus/spanish/ency/article/000714.htm