Conscientes de que apreciar bien un producto también es conocer la cultura que lo hace surgir, la Cámara Nacional de Comercio, Servicios y Turismo, y el Consejo Regulador del Tequila desarrollaron bajo el concepto de Ruta del Tequila una red de empresas que impulsa el consumo de la cultura tequilera.

"El recorrido se puede hacer en un día, visitando algunos lugares estratégicos, o en tres o cuatro días si se desea profundizar más en el conocimiento de las costumbres, el estilo de vida, la región y las fábricas de tequia. Si te das la oportunidad de visitar un campo de agave sabrás por qué estos paisajes se ganaron el título de Patrimonio de la Humanidad", explica Margarita Arana Cisneros, representante de la Ruta del Tequña, refiriéndose al título otorgado por la UNESCO a la región que incluye los municipios de Amatitán, Tequila y Arenal.

Aunque cada una de las marcas más representativas del tequila cuenta con su propio recorrido, Arana recomienda visitar una fábrica grande y otra más pequeña:

"Recomendamos visitar una fábrica de tequila grande para que las personas conozcan el proceso industrial de la producdón de esta bebida, pero también que visiten destilerías famiñares donde los turistas son atendidos por los propietarios de las bodegas.

"El espacio de estas fábricas es pequeño, así puedes conocer el proceso más de cerca, incluso en algunas, si se desea, es posible sentir el peso de la coa con el que se hace la jima del agave", dice Arana.

Como uno de los dos productos mexicanos con Denominación de Origen (DO) e Indicación Geográfica (IG) -la cual incluye cinco estados de la República: Jalisco, Nayarit, Guanajuato, Tamaulipas y Michoacán, parte del sabor del tequña está en las manos y costumbres de los hombres que lo trabajan, así como en la gastronomía que lo rodea.

"Realmente recomendamos visitar cada uno de los pueblos mágicos tequileros. Tequila y Amatitán tienen un centro histórico de arquitectura colonial precioso. También allí se pueden degustar algunos platillos, pues a lo largo de la Ruta varios restaurantes ofl-ecen una gastronomía a base de tequña o agave azul. Esto ha empezado a generar una cocina muy especializada e innovadora, porque estos platinos solamente pueden satrarearse en esta región.

"También está Arenal, un pueblo precioso que es la puerta de entrada de la Ruta del Tequña, caracterizado por su paisaje agavero rodeado por haciendas abiertas al público. Para los más sofisticados, a lo largo de la ruta se pueden encontrar clubes de golf listos para utilizarse", menciona Arana.

BEBIDA ESPIRITUOSA

El tequila no sólo es el licor espirituoso más conocido de México, también es el mejor estudiado y regulado. La Academia Mexicana del Tequña se dedica a investigar y experimentar las mejores recetas de la bebida y el Consejo Regulador del Tequña, desde hace 15 años, certifica que las botellas con esta etique-' ta satisfagan los requisitos necesarios y suficientes para ganarse el título de tequilas.

"Sólo puede recibir el nombre de tequña la bebida producida a base de Agave Tequñana Weber Variedad Azul bajo dertas condiciones y procesos, en el estado de Jalisco, y algunos municipios de Nayarit, Tamaulipas, Guanajuato y Michoacán", indica Miguel Ángel Domínguez Morales, presidente del Consejo Regulador del Tequila, mientras celebra el Récord Guiness granjeado por exponer en un espado el mayor número de botellas distintas de tequila (201).

En el contexto del XV Aniversario del Consejo Regulador del Tequña, Domínguez asegura que se firmaron convenios con otros productores regulados por la indicación geográfica -tales como el brandy de Jerez y la cachaza brasileña con el objetivo de brindar entrenamiento e información para el personal de las instituciones firmantes y así difundir el tequña en sus respectivos mercados.

Y es que esta bebida desde hace mucho dejó de ser el elixir agreste que tenía que tomarse con un Umón para contrarrestar su sabor, y que sólo podía disfrutarse entre mexicanos. Hoy este producto cuenta con su propia copa Riedel, y hay versiones para diferentes tipos de consumidores, incluso internacionales.

Laprimera distinción que debe considerarse es la de si se trata de un tequila 100% agave o no. El primero obtiene sus jugos y azúcares sólo del agave certificado, mientras que los otros emplean tiasta un 49% de azúcares de otras fuentes. Todos pasan por un proceso que va de la jima de la planta, cocción de su corazón o pina, extracdón del jugo, fermentación y destñación. Además, algunos pasan por un proceso de doble destñación, y maduración en barrica.

"Están los tequñas blancos, los jóvenes, los reposados, los añejos y los extra añejos. Los reposados al menos tienen dos meses de maduración en barrica, el añejo un año, y el extra añejo mínimo tres", señala Martha Becerra Ríos, de Aseguramiento de Producto Terminado del Consejo Regulador del Tequila.

En cuanto a su apreciación, comenta que son tres los rubros de aromas que pueden encontrarse en un tequña, según su clase y lugar de origen.

Los aromas primarios dependen mucho de la localización del agave, pues estos olores provienen de la materia prima. Son notas aromáticas cítricas, frescas y herbáles. Luego están las fragancias secundarias, provenientes de la fermentación, donde se pueden encontrar notas lácticas, a caramelos, vainñlas, flores o frutas. Por último estánlos olores terciarios de la madera, por eso los añejos y extra añejos dan una gama más amplia en nariz.

Texto y fotos: Felipe Ángeles