El físico del individuo, así como sus relaciones personales, pueden verse deterioradas cuando el uso de las bebidas embriagantes se convierte en abuso y luego, en dependencia.

Raúl Fernández Jofre, director del Hospital Toxicológico de Venustiano Carranza, de la Secretaría de Salud local, explicó que el consumo del alcohol tiene repercusiones en tres niveles, a los que llamó una esfera biopsicosocial.

Las primeras de estas repercusiones ocurren a nivel físico, cuando el individuo abusa y llega a una intoxicación que origina la pérdida del control de los sentidos.

"Hay una inhibición de la hormona antidiurética, hay pérdida de líquidos que se traduce en pérdida de electrolitos. Si esta pérdida no la corrijo, empieza a haber arritmias cardiacas porque se pierde magnesio, sodio, potasio.

"Si el paciente no controla el vómito, se crea el Síndrome de Mallory-Weiss, causado por la presencia del alcohol que hace que la presión de la cámara del estómago, cuando está vomitando, sea tan fuerte que se rompa y se transforma en una verdadera urgencia", explicó.

Añadió que a partir de esos incidentes físicos comienzan las repercusiones en la siguiente esfera; la familiar.

"Cuando ocurre uno de estos siniestros un accidente o una enfermedad derivados del consumo de alcohol obviamente todos los factores se rompen ¿Qué pasa en el núcleo familiar? Hay gastos y comienzan a buscar culpables, por lo que se dan los primeros enfrentamientos", indicó.

Cuando el consumo continúa, el abuso se toma en dependencia y las afectaciones rebasan a lo familiar para llegar a lo social.

En esta etapa, el individuo presenta cuadros físicos como el síndrome de abstinencia, pero además tiene alteraciones que impiden que continúe con su desarrollo en el entorno biopsicosocial.

Entre los ejemplos citados por el especialista están el abandono de la escuela, el de la familia, y los problemas legales cuando el alcohólico realiza cualquier cosa para obtener la sustancia, como robar o agredir a alguien más.

Algunas enfermedades relacionadas con alcohol son los accidentes, la intoxicación, la gastritis, el hígado graso y la cirrosis hepática, entre otras