Autoridades de salud y expertos alertan sobre el alto consumo de alcohol entre jóvenes del Distrito Federal.

Y es que en cinco años se duplicó la cantidad de estudiantes de nivel secundaria y preparatoria de la Ciudad de México que bebe más de cinco copas cada vez que van de fiesta.

En 2003, sólo uno de cada cuatro -23.8 por cientotomaba más de cinco copas al menos una vez por mes, un nivel considerado alto por las autoridades de salud.

En tanto, para ei año pasado, más de la mitad de los jóvenes consumía esa cantidad -52.2 por ciento-, de acuerdo con la Encuesta Nacional de Adicciones 2008, que la Secretaría de Salud federal dio a conocer el mes pasado.

Para el director técnico de adicciones del Consejo Nacional contra las Adicciones, Armando Patrón, el aumento de esta forma de consumo tiene entre sus causas la alta disponibilidad de las bebidas alcohólicas.

"Hay una alta tolerancia para el abuso de las bebidas en el contexto de lo festivo y lo familiar", afirmó.

Recordó que para controlar el consumo se deben implantar acciones muy firmes respecto a la reducción de puntos de venta, así como respetar la distancia mínima entre los planteles educativos y los establecimientos en los que se expenden bebidas.

Con él coincidió Raúl Fernández, director del Hospital Toxicológico de Venustiano Carranza, de la Secretaría de Salud del DF, quien explicó que el alto consumo está relacionado con la permisividad familiar.

"Si el papá toma, si la mamá toma, si los hermanos toman, empiezan a influir o ser facilitadores para que el joven tome. Él, a su vez, va a ejercer presión de pares a sus similares y va a hacer que otros con los que convive tomen", dijo.

Lydia Barragán, del Centro de Atención y Prevención de Adicciones de la UNAM, afirmó que la presión social y el hecho e que el alcohol esté asociado a momentos de convivencia acompañados de placer, sensación de euforia y relajación hacen que el consumo alto se incremente.

La Encuesta Nacional de Adicciones indica que, ante el aumento en el número de usuarios fuertes de alcohol y los problemas asociados, es necesario dar una atención prioritaria a esta situación y di.señar estrategias de prevención que partan desde la población infantil.

El documento, que por primera vez incluye reportes para cada entidad de la República, también revela que en el DF 68.8 por ciento de los jóvenes de bachillerato y secundaria ha consumido alcohol alguna vez en su vida.