Iliana Chávez M.

El senador panista Ernesto Saro Boardman defendió el impuesto adicional al consumo del tabaco, al argumentar que contribuirá a enfrentar el impacto en los servicios médicos generado por esta adición en el presupuesto del Sistema Nacional de Salud.

El presidente de la Comisión de Salud sostuvo que la demanda de atención médica por el consumo de tabaco ha crecido en los últimos años, lo cual propicia una presión adicional de atención médica a las enfermedades derivadas del uso del cigarro.

Actualmente, el presupuesto de atención médica destinado a atender padecimientos derivados del tabaquismo asciende a 45 mil millones de pesos anuales, según un estudio del Instituto Nacional de Salud Pública (INSP); en tanto que la recaudación por el Impuesto Especial sobre Productos y Servicios (IEPS) al tabaco fue de tan sólo 24 mil millones.

Explicó que los 21 mil millones faltantes se han cubierto con recursos presupuéstales federales que se podrían destinar a otros rubros en materia de salud que también requieren mayores participaciones.

De acuerdo con el mismo estudio del INSP, agregó Saro Boardman, de aprobarse un incremento al tabaco, el consumo disminuiría en seis por ciento y la recaudación sería superior a los 27 mil millones de pesos.

No obstante, admitió que los 80 centavos adicionales que se cobrarían por cajetilla, de acuerdo con la propuesta del Ejecutivo Federa, son poco si se considera a la recaudación como efecto inhibitorio del consumo.