Ruth Rodríguez y Edith Martínez

politica@eluniversal.com.mx

Más de 20 organizaciones civiles y sociedades médicas formarán un bloque y presentarán a la 61 Legislatura una propuesta de incremento al impuesto de los cigarros de 235%, pero de un solo golpe y no de manera gradual.

De acuerdo con el Instituto Nacional de Salud Pública (INSP), en México se destinan 45 mil millones de pesos al año para atender enfermedades relacionadas con el consumo de tabaco y los costos aumentan cada año por la suma de nuevos fumadores.

En nuestro país, hay alrededor de 14 millones de fumadores, y cada día fallecen 165 personas a causa de las enfermedades que ocasiona el tabaco.

Jesús Felipe González, de la organización México sin Tabaco, dijo que con el aumento al gravamen disminuiría hasta en 10% el número de fumadores en México. Es decir, un millón 400 mil.

El INSP indicó que los recursos que el país designa a la atención médica de enfermedades cardiovasculares y respiratorias causadas por el tabaquismo representan 0.10% del Producto Interno Bruto (PIB).

Sin embargo, los impuestos que se aplican al tabaco permiten apenas la recaudación de 24 millones de pesos, cantidad menor a la que se destina a curar las enfermedades causadas por él. Hasta 2008, según el Instituto mexicano del Seguro Social (IMSS) existían en todo el país 16 millones de personas, cifra que resultó del aumento de fumadores en la última década. En 1998 había 9 millones de consumidores de tabaco.

Al referirse a una fotografía que publicó EL UNIVERSAL en la que se observa al secretario de Gobernación, Fernando Gómez Mont, fumando en lugar prohibido, González dijo que el funcionario es el primero que debe cumplir la ley antitabaco. Pero pidió sensibilidad hacia él, porque se desconoce el de adicción que tiene sobre este producto. "No sabemos cuántos cigarros se fuma al día", expuso.

La investigadora del INSP, Luz Miryiam Reynales, explicó que para disminuir la tendencia creciente de fumadores, es necesario aumentar los impuestos para desincentivar su consumo.

Por su lado, Jesús Felipe González recordó que en la actualidad el impuesto a los cigarros es del 130%. Con la propuesta de las organizaciones civiles, dijo, se busca que suba a 230%.

La propuesta del INSP es que el incremento sea de 235% del precio de fábrica, para que la caja de cigarros esté en un precio aproximado de 33 pesos, de lo contrario se facilita el acceso a ellos para jóvenes, que son los principales consumidores.

Precisó que esta aplicación debe ser de golpe y no gradual, porque se diluye el impacto que se requiere para reducir el número de consumidores de cigarros.

Recordó que Argentina, Brasil, Chile y Uruguay tienen impuestos más altos que México.

Sobre los operativos que realiza la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris) para verificar que se cumpla la Ley Federal para el Control del Tabaco, dijo que son buenos, pero se está cayendo en la centralización.

Consideró que es importante que la verificación la realicen las autoridades locales y estatales, pues si bien los operativos que lleva a cabo la Cofepris son importantes, no llevan la velocidad que se requiere para cubrir todos los estados de la República.

Jesús Felipe González explicó que además de la propuesta de incremento de impuestos a los cigarros, se requiere de una reforma fiscal que permita recaudar dinero para destinarlo a campañas de prevención sobre el daño que provoca el fumar.

Para presionar a los legisladores, un grupo de organizaciones civiles formó la Alianza Nacional para el Control del Tabaco, que buscará se cumplan los compromisos firmados por México para reducir la cifra de fumadores.