El grupo estadounidense de bebidas alcohólicas Constellation Brands abandonó la semana pasada su interés en la compañía con sede en Gran Bretaña Allied Domecq, abriéndole el camino a la francesa Pernod Ricard para que tome el control del fabricante del ginebra Beefeater y del coñac Courvoisier. La oferta de Pernod, de 7 mil 600 millones de libras, creará a un fuerte segundo lugar en la industria mundial de bebidas alcohólicas y lo situará a la par de Diageo.