Hasta el momento se cuenta con un padrón de mil 38 licencias legalmente aprobadas, aunque dijo que el problema mayor es la venta clandestina, lugares que no cumplen con los reglamentos y sobre todo que infringen la ley vendiendo productos a menores de edad.

Afortunadamente, expresó González Ontiveros, se cuenta ahora con tres inspectores que realizan supervisiones tanto en la cabecera municipal como en comunidades para poder disminuir esta problemática, y tener un comercio en orden.

Explicó que este nuevo proyecto será presentado en la próxima sesión de cabildo, donde espera sea aprobado por los regidores, para dar paso al orden y reubicación de algunos comercios, especialmente los conocidos como “loncherías”.

La falta de orden, los vicios arrastrados desde hace mucho tiempo, y la falta de aplicación del reglamento, que es difícil subsanar, argumentó el funcionario, ha provocado el aumento en estos negocios disfrazados de loncherías, pero donde se practica la prostitución.

Habitantes de las colonias que se encuentran aledañas a estos lugares, principalmente ubicados en el centro de la ciudad, solicitan con urgencia la reubicación de estos negocios en una zona de tolerancia, ya que aseguran “no se puede vivir tranquilo en medio de agresiones, violencia, alcohol y malos ejemplos para los niños”, más aun en las noches, cuando la situación es intolerable.

González Ontiveros dijo que se han tomado cartas en el asunto, girando hasta el momento 150 citatorios a quienes infringen la ley, esto con base en las quejas ciudadanas.

Seguirán trabajando de la misma forma, señaló, en coordinación con Seguridad Pública; de no apegarse al reglamento y cumplir con los requerimientos, podría haber cierre de negocios, adelantó.