Tupungato, Argentina (23 agosto 2011).- Con apenas cuatro años de haber lanzado su primer vino al mercado, la bodega Atemisque es una de las apuestas vinícolas de la zona de Mendoza que está disponible en México y que busca engrandecer sus vinos y la zona.

Por un lado, el enólogo Adrián Vargas comenta que mezclan viñedos de plantas jóvenes y viejas en la elaboración de los vinos.

"Tenemos plantas con 20 años de edad que compramos al propietario anterior y que se encuentran en nuestra zona de trabajo, son de las uvas Pinot Noir, Chardonnay y Merlot.

"Dentro de las jóvenes tenemos plantas de Malbec, Cabernet Sauvignon, Sauvignon Blanc y Viognier. Todas mezclan cepas típicas e integran algunas novedades para dar una cara distinta a los consumidores sobre todo internacionales", comentó.

Por otro lado, la bodega busca desarrollar el enoturismo y apuesta por algunos conceptos que piensan atraer el turismo internacional.

"Está el Rincón Atemisque, un restaurante que no se encuentra donde está la bodega sino en una gran finca donde hay un criadero de truchas que también hemos ampliado. Sobra decir que la especialidad del lugar es este pescado.

"Además ya se construyen cabañas de alto nivel y un campo de golf, así como la posibilidad de visitar los viñedos a caballo o en bicicleta para fomentar la visita de la zona", señaló.

Atamisque maneja tres líneas de vinos de nombre Sebral, Catalpa y Atemisque donde la mayoría de los vinos muestran la expresión del varietal (uva) en el terruño.