En caso de que algún uniformado no pase la prueba de alcoholímetro, no se le permite realizar sus labores operativas y se le aplican sanciones administrativas, que van desde una multa hasta el arresto.

El titular de la PMM, Federico Cuesy Adrián, señaló que esta medida se aplica a todo el personal operativo, con el objetivo de que los policías de esta corporación estén en condiciones para el desempeño de sus funciones, además de sanearla de malos elementos.

Con esta medida, agregó, busca dar un servicio de excelencia a la ciudadanía, y la seguridad de que todo el personal en funciones esté debidamente supervisado.

La Policía Municipal de Mérida tiene cerca de 400 elementos operativos, con un radio de vigilancia que abarca el primer y segundo cuadros de la ciudad.

Como se sabe, la PMM dividió el área de vigilancia que le corresponde en nueve sectores para incrementar el tiempo de respuesta ante una llamada de auxilio indicó el director Federico Cuesy Adrián.

Ahora estamos realizando una radiografía en la zona de nuestra jurisdicción, esto para definir los delitos de mayor incidencia y horarios en los que se cometen, ya que de esta manera se elaborarán estrategias para reducirlos expresó.