Monterrey, NL.- La responsabilidad de los establecimientos que venden alcohol en el estado aumentará considerablemente, de aprobarse la nueva Ley de Prevención y Combate al Abuso del Alcohol y de Regulación para su venta y consumo.

De siete obligaciones que dictaba la ley actual, el número ascenderá a 26, entre las que se destacan retirar de las mesas las bebidas alcohólicas que continúen servidas en las mesas hacia el vencimiento del horario.

Las prohibiciones también se incrementan a 23, entre las que destaca: “causar molestias a los vecinos con sonidos o música más alto del volumen permitido”, situación que se sancionaría de dos mil 240 a ocho mil 440 pesos.

El tratamiento de rehabilitación para quienes conduzcan y manejen ya no sólo será obligatorio. Además, no concluirlo será motivo de sanción económica y retiro de la licencia por 18 meses.

Al respecto de los nuevos tipos de prohibiciones, así como sus respectivas sanciones, el presidente de la Comisión de Legislación, Héctor García García, señaló que todo ello tendrá mayor control a estos expendios por parte de los ayuntamientos.

“Así como este concepto hay dos o tres más, se elevan las multas, hay costos mayores para los que infrinjan la ley de alcoholes, pero también tenemos muchos puntos positivos”, afirmó el priista.

Afirmó que hay consensos y comentarios positivos por parte de los alcaldes de San Pedro, Santa Catarina y Guadalupe.

La ley será dictaminada el día de hoy y si es aprobada, se llevará al Pleno el próximo lunes para su aprobación y publicación.

Milenio.- Daniela Mendoza