Los mismos empresarios indican que el problema es que se está generando mayores adversidades en la macroeconomía, como en la mayoría de las industrias, más que por ser extorsionado por los grupos criminales en la región, reconoció el empresario del ramo, Eduardo Barba Casillas.

“No creo que alguna otra tequilera esté bajo presión por parte del crimen organizado. Si nos ha afectado en el entorno macroeconómico, como a cualquier otra industria, pero en lo particular que seamos blanco del crimen organizado, no creo que sea el caso”.

La violencia se traduce para los empresarios de una manera generalizada en pérdidas financieras y de mercado a corto e incluso a largo plazo.