No es así.

Japón es la tercera economía del orbe, y hasta hace muy poco era la segunda. Cualquier cosa que le afecte va a tener implicaciones en casi todas partes.

Quienes han hecho cuentas y han cifrado los costos del desastre, seguramente se han quedado cortos. Hacen falta muchos datos para dimensionar con más precisión el tamaño de los problemas.

Sin embargo, hay varios puntos que ya se pueden poner sobre la mesa.

1.- El tamaño del desastre. Hacia la mitad del mes de febrero, el índice Nikkei logró un máximo en los últimos 2 años cercano a los 10 mil 500 puntos. En la sesión del martes, el cierre fue de 8 mil 605 puntos. Esto significa una caída de 18 por ciento.

En términos del valor destruido, esto equivale a un monto de 691 mil 380 millones de dólares.

Ninguna de las cuantificaciones del tamaño del desastre llega a esta cifra, pero, de hecho, apenas es un indicio del tamaño del problema.

2.- Hay quienes afirman que el tamaño del desastre equivale al 5 por ciento del PIB de Japón, lo cual sería equivalente a 270 mil millones de dólares. Independientemente de cuál sea la dimensión del desastre, la que indica la bolsa o lo que se pretende cuantificar en las cuentas nacionales, el hecho es que es una suma inmensa, que va a afectar a la economía mundial en este año.

3.- Sin embargo, el efecto de contagio es mucho mayor. Si tomamos como referencia mundial la caída del Global Dow sobre la base del valor de los mercados agrupados en la Federación Mundial de Mercados de Valores, la pérdida de valor en los mercados bursátiles del mundo es de alrededor de 3 billones (millones de millones ) de dólares, lo que se acerca al 5 por ciento del PIB de todo el mundo.

4.- Estamos en el vórtice y las cosas pueden ser o mejores que las estimaciones que le anticipo o mucho peores. Todo depende de lo que pase en las próximas horas y los próximos días. Los problemas como los que estamos enfrentado ya en México, como la interrupción de suministros en algunos sectores, son asuntos del corto plazo que van a resolverse. Los problemas de fondo tienen que ver con el impacto de una caída en una de las principales economías del mundo.

5.- Si Japón es importante para México y Estados Unidos, lo es mucho más para las naciones de Asia, la zona que está convertida en el motor de la economía mundial. El freno económico que el tsunami va a representar para las naciones de la costa del Pacífico, incluyendo China, va a hacer perder 2 o 3 puntos del ritmo de crecimiento de toda aquella zona.

Al final, los terremotos y tsunamis pueden ser positivos, en una perspectiva histórica.

Nos hacen pensar de nuevo en nuestra dimensión.

Somos una especie extrañamente exitosa en un pequeño planeta perdido, en un muy secundario sistema solar de una lejana galaxia.

Las fuerzas de este mundo todavía están muy lejos de nuestro control. Y más vale que seamos lo suficientemente humildes para entender que seguimos padeciendo los azares de la naturaleza y que tenemos mucho trabajo por hacer, simplemente para entenderlos.