Desde hace 10 años se hizo ver en una reunión binacional en la que participaron representantes de las tres esferas de gobierno mexicano la necesidad de incentivar la participación de la sociedad civil e incluso la creación de una asociación civil en Ciudad Juárez similar a Mothers Against Drunk Drivers.

Recientemente dentro del programa Todos Somos Juárez se incluyó un apartado para la prevención de accidentes provocados por el consumo de alcohol, pero estas acciones también han sido insuficientes.

Por su parte, funcionarios del Gobierno del Estado y del gobierno municipal han expresado sus intenciones de colaborar en la dismunición de accidentes viales, pero ha quedado en mero interés, sin que existan programas permanentes independientemente del relevo de funcionarios de los gobiernos con el cambio de administración.

En días pasados, el director médico de la Secretaría de Salud, Samuel Santana, urgió a la ciudadanía cambiar la cultura vial para lograr disminuir la mortalidad en la entidad.

Expresó que es interés del secretario de Salud, Sergio Piña Marshall, y del gobernador César Horacio Duarte Jáquez apoyar coadyuvar con las diversas instituciones para lograr bajar el índice de accidentes viales que hay en el estado.

Dijo que con la dismninución de accidentes también se logra el beneficio en el gasto y presupuesto del gobierno, pero sobre todo para las familias chihuahuenses, quienes muchas veces no están preparadas para enfrentar problema de este tipo.

NORTE de Ciudad Juárez en su edición del domingo informó que pese a los riesgos y daños millonarios que provocan los conductores ebrios a la ciudad, en Juárez se carece de un programa preventivo integral que no sólo privilegie sanciones económicas, sino ayude a concientizar acerca del peligro que representan en las calles los guiadores bajo los influjos del alcohol.

Durante una reunion binacional celebrada en El Paso, Texas, en octubre del 2000 se elaboró un documento, el cual obra en poder de NORTE, con un plan de acción para la disminución de muertes, lesiones y discapacidades originadas por accidentes de tráfico en la region fronteriza.

Durante el evento al que asistieron funcionarios de las tres esferas de gobierno se coincidió en que todos los accidentes son 100 por ciento previsibles y prevenibles; cualquiera que sea el número de accidentes se justifica el implementar un programa de prevención de los mismos, sobre todo si los accidentes son causa de muerte, lesión o discapacidad.

Entre las causas subyacentes para que se presenten un alto número de accidentes de tráfico se identificaron: la falta de experiencia de conductores jóvenes; falta de conciencia sobre la responsabilidad de conducir un automóvil, lo que lleva a imprudencia y negligencia al conducir o a manejar con agresividad; manejar por arriba de los límites de velocidad, realización de actividades distractoras como uso de teléfonos celulares, maquillaje y lectura de documentos mientras se maneja; desconocimiento de las normas de tráfico tanto por parte de choferes como peatones; manejar bajo el efecto de alcohol y otras drogas; y aumento de factores de riesgo durante el fin de semana (mayor tráfico nocturno, consumo de alcohol, mayor número de peatones, mayor número de jóvenes manejando), entre otros.

Asi mismo se señaló que la gravedad de las lesiones (incluyendo la muerte) y la magnitud de las discapacidades se ven influenciadas por el exceso de velocidad, la falta de uso de cinturón de seguridad, la falta de infraestructura física y tecnológica para la atención de pacientes gravemente traumatizados.

Resaltaron que influye la falta de conciencia de vendedores de licor, falta de respeto a las leyes, falta de supervisión de los padres, falta de aplicación estricta de las leyes y reglamentos de vialidad.

Entre los objetivos que se planearon se encontraban: disminuir la incidencia de accidentes viales, lesiones y muertes relacionados con la ingesta de alcohol; desarrollar campaña de concientización de vendedores de licor sobre la relación consumo de alcohol y accidentes de tráfico; reuniones con dueños de bares/discotecas y cantineros para informarles sobre relación alcohol–accidentes y sobre los programas que se proponen.

Además desarrollar incentivos para apoyo a la campaña de conductor designado; desarrollar incentivos para uso de línea telefónica para conducir a guiadores ebrios; desarrollo de campaña de concientización de padres de familia de jóvenes sobre la relación de factores de riesgo de accidentes de tráfico. (Fines de semana, consumo de alcohol, vehículos modificados, etc.;desarrollo/compilación de materiales educativos sobre prevención de accidentes; campaña de comunicación social en medios masivos de comunicación para desalentar el uso/abuso de alcohol; campaña de comunicación social dirigida a sociedades de padres de familia de escuelas preparatorias y universidad; y creación de una asociación civil en Ciudad Juárez similar a Mothers Against Drunk Drivers.

Lo anterior toma relevancia ya que estadísticas señalan que en el país 11 jóvenes mueren diariamente a causa de accidentes viales. Por cada uno de éstos, cuatro jóvenes más quedan seriamente lesionados o sufren de alguna discapacidad.

Entre los principales factores de riesgo relacionados con la severidad y ocurrencia de este tipo de accidentes destaca el exceso de velocidad, el consumo excesivo de alcohol, el consumo de drogas, el no usar cinturón de seguridad, el cansancio y la distracción.

En la actualidad, los accidentes viales son considerados como un problema grave de salud pública, por lo que se requieren más esfuerzos coordinados por parte de las tres esferas de gobierno e incluso mayor participación de organismos como la Organización Panamericana de la Salud.

Además de que los operativos antiebrios que realizan agentes de vialidad dejen de tener un afán recaudatorio y se dé cumplimiento a los programas que buscan crear una mayor conciencia y participación de la comunidad.

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