Ya le comentamos la semana pasada que, pese a detalles que deben discutirse, la propuesta fiscal de los senadores priistas parece mejor armada de lo que se veía y ha generado un respaldo sorprendente, aunque todavía tiene que pasar su prueba de fuego en la aceptación de los diputados del propio PRI.

Hay otra que también puede volar: se trata de la reforma de la Ley Federal del Trabajo que lanzaron los diputados priistas.

En términos generales, creo que las reformas propuestas a la ley no modifican las prácticas que ya existen en el mundo laboral mexicano, pero sí les da una regulación de la que hoy carecen.

Incluso hay signos de que la reforma a la Ley Federal de Competencia Económica podría caminar nuevamente.

La ventana de oportunidad se abre en virtud de la percepción de grupos priistas de que hay que dejar preparado el camino para el regreso a Los Pinos en 2012, que ya ven como algo inminente.

De la reforma fiscal propuesta ya le comentamos el viernes. Veamos ahora qué trae la reforma laboral.

Aquí le va sólo algo de lo relevante.

1.- Se establecen tres nuevas fórmulas de contratación: la de periodos de prueba; contratos de capacitación inicial y trabajo de temporada.

Aunque muchas empresas los realizan en la práctica, están en el margen de la ilegalidad. Con la reforma quedarían perfectamente regulados y eliminarían disuasivos de la contratación que hoy existen. Será un paso a la flexibilidad, aunque no les guste denominarlo así.

2.- Se eliminan prácticas onerosas para las empresas en el despido. En la actualidad, la empresa tiene que notificar personalmente al trabajador la rescisión de su contrato. La no recepción del aviso es un artilugio empleado por toda una mafia de gestores en las juntas de conciliación, el cual se terminaría. Lo mismo que, de facto, se topa en un año el pago de salarios vencidos, lo que va a quitar incentivos a la industria de paros interminables que pegan sobre todo a las empresas pequeñas.

3.- Se regula el outsourcing y se considera a la empresa que lo contrata como el auténtico patrón del trabajador. Esto desalentará el uso del outsourcing como esquema de elusión fiscal.

4.- Por primera vez se introduce el tema de la productividad dentro de la ley. Y, aunque resulta insuficiente su detalle, ya es un primer paso.

5.- Se flexibilizan formas de pago y horarios. Resulta increíble que en cierta medida el pago a través de nómina bancaria sea violatorio de la ley o bien que lo sean también los trabajos que requieren horarios y días especiales. Aquí se dará un paraguas legal que hoy no existe.

6.- Se propone una reforma para profesionalizar a las Juntas de Conciliación y Arbitraje, pues se quiere profesionalizar su integración. En este caso, además, se plantea un procedimiento especial para resolver las 261 mil demandas relacionadas con los recursos de la Consar que se han acumulado en los últimos 4 años.

Hay que señalar que en la propuesta quedan completamente afuera los sindicatos.

Ese hecho es el que, por una parte, limita los cambios que puedan hacerse en la vida laboral de muchos, pero al mismo tiempo da viabilidad a una reforma que podría obtener el respaldo del PAN y con ello pasar tan pronto como en abril.