A pesar de que las autoridades de la localidad aseguraron que moderarían los puestos que expiden bebidas alcohólicas, el zócalo estuvo repleto de puestos de este giro, así como las calle Zaragoza, Cuauhtémoc, 5 de Mayo, Zapata, Morelos y No Reelección.

La Dirección de Licencias y Reglamentos contabilizaron 150 puestos de “micheladas”; sin embargo, fuentes de la Dirección de Protección Civil aseguraron que había más de 200 locales de este giro.

El alcalde Humberto Segura Guerrero dijo que este año, al igual que el anterior, trató de moderar la venta de alcohol no expidiendo más permisos; no obstante, el funcionario refirió que esta situación es un problema.

“Sabemos que tenemos muchos, sabemos que uno de los principales problemas, pues, es la venta de la bebida; sin embargo, la gente, si no la vendiéramos aquí, la conseguiría, tendría que buscar en otra parte”, comentó.

Ante la venta de alcohol a los menores de edad, Humberto Segura refirió que este caso es muy difícil de controlar, ya que muchas de las veces los adultos compran las cervezas y ellos son quienes se las dan a los menores.

“Es muy difícil. Por supuesto, no se les vende; sin embargo, tú le vendes a un mayor y él se los da a los menores, esa es la operación que ellos hacen; sin embargo, buscamos en todo momento tener máximo control y que los jóvenes no tomen mucha bebida, que tomen pero moderadamente”, expresó.

De acuerdo a información otorgada por la Secretaría de Seguridad Pública del municipio, el viernes hubo 109 personas detenidas, de las cuales: 42 fueron aseguradas por reñir; 40, por alterar el orden; 12, por hacer sus necesidades fisiológicas en la vía pública; 5, por andar en exceso de ebriedad; 2, por faltas a la moral; uno, por drogarse, y 7, por hacer desorden.