Morelia, Michoacán.- Las consecuencias de la falta de un ordenamiento para la comercialización y consumo de bebidas alcohólicas, son graves consideró el diputado Wilfrido Lázaro Medina al informar que la iniciativa de “Ley General para la Venta de Bebidas Alcohólicas en Michoacán”, está siendo estudiada y analizada desde las Comisiones Parlamentarias y cuenta con buen avance.

En las disposiciones generales de esta Ley, se propone, unifique criterios, y regular la actividad comercial así como prohibiciones y sanciones a los establecimientos destinados a la elaboración, envasado, almacenamiento, distribución, transportación y venta de bebidas en recipiente cerrado, y consumo al copeo de bebidas con contenido alcohólico.

Lo anterior porque mencionó que en las principales cabeceras municipales se encuentra un considerable número de población flotante, producida por migración de los habitantes de sus comunidades y de otros municipios o estados, movilidad motivada, entre otras razones, por la necesidad de buscar mejores oportunidades laborales, o de estudios, y mejorar así la calidad de vida.

Sin embargo señaló Lázaro Medina, este fenómeno, fomenta la actividad económica de los lugares donde se asientan e impulsa la aparición de establecimientos dedicados al esparcimiento, principalmente aquellos que son dirigidos a la juventud, y en los que común y lamentablemente se ingieren bebidas alcohólicas en forma abundante y de dudosa calidad y procedencia lo que motiva problemas de diversa índole.

Lázaro Medina se refirió también a que entre las bondades de esta Ley se busca combatir y prevenir el alcoholismo que se ha convertido en un problema serio y los daños que ocasiona afectan a los entornos sociales.

El abuso en el consumo de bebidas alcohólicas vulnera la salud y el bienestar social, personal y familiar del bebedor, y repercute en la sociedad en general al ponerla en peligro con respecto de ebrios al volante en las calles, y cuya tendencia indica que son cada vez más las personas que consumen o se inician en el consumo a edades tempranas.

Mencionó también que entre los problemas asociados con el consumo de bebidas alcohólicas se encuentran las enfermedades crónicas degenerativas y las consecuencias agudas, como son las intoxicaciones, los accidentes y los problemas relacionados con el comportamiento antisocial, y de violencia intrafamiliar.

La tasa de incremento de estos riesgos aumenta según la cantidad de bebidas alcohólicas ingeridas, siendo aun más peligrosos cuando está asociada con bebidas que son adulteradas;

Por ello destacó que esta Ley, además de proporcionar las reglas para la convivencia del ser humano en sociedad respecto a estas bebidas, debe proteger, a los individuos afectos a la bebida embriagante, de las conductas insanas e ilícitas de otras personas que obtienen lucros indebidos adquiriendo bebidas alcohólicas de dudosa procedencia, o alterándolas ellas mismas, para venderlas en sus negocios, sin importarles que puedan dañar la integridad física e, incluso, motivar la pérdida de vidas de los jóvenes o de las personas que frecuenten ese tipo de lugares para consumo, acotó.