
COORDENADAS
Inconsistencias fiscales.
08/02/2011
Enrique Quintana
Enrique Quintana
La propuesta fiscal del PRI abre una agenda de discusión, aunque está llena de inconsistencias
Hay que reconocerle al senador Manlio Fabio Beltrones que tiene la capacidad para poner temas en la agenda nacional... aunque luego sus propuestas no puedan sostenerse.
La más reciente y polémica es su proyecto fiscal, que se basa en una reducción de IVA y del ISR, manteniendo exenciones en canastas básicas. Con esto, señala que permitirá que la economía se recupere y que se recauden más impuestos.
En el largo plazo, es probable que los senadores del PRI tengan razón. Impuestos con tasas más bajas y más simples de pagar pueden inducir mayor crecimiento que redunde en una más elevada recaudación.
Pero, en el corto plazo, no hay ningún sustento efectivo en lo que proponen los senadores priistas.
La semana pasada le comenté que el efecto neto de la reducción y generalización del IVA, considerando una canasta básica que mantenga la tasa cero en alimentos, dejaría una recaudación adicional equivalente al 2 por ciento de los ingresos presupuestales de 2010.
Si además se baja ISR al 25 por ciento como tasa máxima en lugar del 30 actual, el saldo neto sería una reducción de alrededor de 30 mil millones en la recaudación total.
Creo que sería perfectamente legítimo que los senadores priistas dijeran que no les importa que en el corto plazo el Gobierno recaude menos, pues lo que quieren es que haya más dinero en los bolsillos de la población.
El problema es que no lo dicen y aseguran que es posible conseguir todo junto.
Una de las estrategias fiscales posibles es reducir las cargas tributarias, aprovechando el escenario de altos precios del petróleo.
Es polémico, pero sería coherente que así se planteara. Lo que no es consistente es que los priistas digan que el Gobierno le apuesta a los altos precios del petróleo como salida para no aplicar la reforma fiscal que proponen. Esa afirmación sería consistente si se tratara de una reforma recaudatoria, pero no de la reforma que el PRI propone.
Dice el comunicado del senador Beltrones difundido el domingo: "Todos sabemos que el sistema fiscal no funciona y que la reforma es inaplazable".
Vaya, pues quién sabe de qué sistema fiscal esté hablando el senador, porque el vigente ha sido excelente para el Gobierno. Le va un dato, entre 2000 y 2010, los ingresos tributarios crecieron en términos reales en 37 por ciento, mientras que la economía lo hizo en 15 por ciento.
Esto implica una recaudación adicional a precios actuales, de 466 mil millones de pesos por año. ¿Fracaso?
Si lo que quiere decir es que busca un sistema fiscal que recaude menos, pero que propicie un mayor crecimiento, entonces se puede discutir.
El otro tema es el esquema de devolución de cuatro puntos de IVA a quienes estén en orden.
Sin duda es una propuesta interesante, pero eso no evitará que un amplio sector de la economía siga en la informalidad.
Insisto en lo que dije al principio, es muy positivo que se ponga sobre la mesa la discusión fiscal, pero no aportan nada las descalificaciones de Hacienda a lo que se conoce de la propuesta, ni la apología llena de calificativos que los senadores priistas han hecho.
Perdón por perseverar en mi pesimismo en esta materia, pero no veo ningún cambio fiscal sustantivo que sea viable antes de septiembre de 2012.
Pero eso sí, veremos mucha pirotecnia fiscal desde ahora y hasta entonces.
Fuente: Reforma
Categoría: FISCAL
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