de México, indicó un análisis de Reuters. Señaló que el ajuste era esperado, pero que podría tener consecuencias

importantes para las principales empresas del país.

Pemex, destacó, sería al gran perdedora, toda vez que la empresa tenía deudas consolidadas por 50 mil 600 millones

de dólares al cierre de septiembre, y encara vencimientos por casi 7 mil 700 millones de dólares hasta septiembre de

2010, según reportes de los reguladores del mercado.

La calificación de deuda de Pemex está muy ligada a la del gobierno, y muchos inversionistas ven sus certificados

bursátiles como papel gubernamental, pese a que la empresa dice que no son lo mismo.

La empresa no tendrá más opciones que absorber los mayores costos del financiamiento a consecuencia del recorte

de la calificación al país, señaló el reporte de Reuters.

Agregó que el recorte de calificación podría tener consecuencias importantes para las principales empresas del país,

pues una menor calificación hará más costoso el crédito para México en el extranjero y, en general, los recortes en la

recomendación de deuda soberana afectan a las empresas con sede en los mercados emergentes, pues eleva su costo de

capital.

Respecto a América Móvil, Cemex y Walmex, descartó que se vean afectados por la baja en la calificación, y dijo que

incluso la telefónica podría mantener una calificación superior a la del país.

La gigantesca operadora de telefonía móvil, controlada por el empresario Carlos Slim, está bien considerada por los

analistas e inversionistas por su hoja de balance conservadora y sus operaciones diversificadas.

Standard & Poors reafirmó en octubre su calificación de BBB+ para la empresa, la mayor operadora de telefonía

celular en América Latina.

Al cierre del tercer trimestre, América Móvil tenía una deuda de 7 mil 800 millones de dólares, la mayoría emitida en

monedas foráneas, según informes enviados a los reguladores del mercado de valores.

En el caso de Telmex, la mayor operadora de telefonía fija del país, podría recibir algún impacto pese a su

conservadora hoja de balance, según analistas locales. La empresa, también controlada por Slim, carece de una base de

ingresos diversificada como América Móvil, y además actualmente lidia con un creciente número de cancelaciones de

líneas en un mercado más competitivo.

Al cierre de septiembre, Telmex tenía una deuda de poco más de 7 mil millones de dólares, carga que ha recortado.

En cuanto a Cemex, es poco probable que la tercera mayor cementera del mundo se vea muy afectada por el recorte, dado que los problemas con su deuda ya pusieron sus calificaciones bajo presión. Actualmente la deuda de Cemex

está calificada muy por debajo de la del país, por lo que es poco probable un mayor recorte. De hecho, tras el proceso de

restructuración de su deuda de 15 mil millones de dólares en meses recientes, las agencias calificadoras han dicho que

podrían elevar sus notas a finales de 2010.

Por su parte Walmex, la mayor minorista del país, virtualmente no tiene deuda y cuenta con el respaldo de su

principal accionista, el gigante estadunidense Wal-Mart Stores Inc. Es poco probable que la empresa se vea afectada, a

menos que el recorte tenga un fuerte impacto sobre la economía del país. Pero aun así no sería suficiente para frenar a la

cadena que aumentó su participación de mercado, pese a que México ha sufrido este año su peor recesión económica

desde la década de 1930, apuntó el análisis de Reuters.