Miguel Ángel Toscano Velasco, responsable de la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris), reconoció ayer que la industria tabacalera se burla de la ley y que busca cualquier tipo de argucia para evitar sacar del mercado las cajetillas de cigarros que no cuentan con pictogramas ni con las advertencias sanitarias.

Reconoció que por una “laguna jurídica”, en el acuerdo promovido por la Secretaría de Salud (Ssa) y publicado en el Diario Oficial de la Federación el 24 de diciembre de 2009, no se estableció la fecha en que las nuevas cajetillas de cigarros con los pictogramas y leyendas sanitarias tendrían que entrar al mercado para su comercialización.

Explicó que este acuerdo secretarial sólo fija que, desde el 24 de septiembre de 2010, las cajetillas de cigarros que se fabriquen, produzcan o importen, tendrán que incluir imágenes y mensajes.

De ahí, admitió Toscano, que los abogados de la Cofepris analizan está irregularidad legal para evitar que la industria tabacalera se ampare.

Por el momento, exhortó a las compañías tabacaleras para que retiren e las tiendas las cajetillas de cigarros que no cuentan con los pictogramas, “y en caso de que encontremos el análisis jurídico adecuado, entonces no nada más las exhortaremos, sino que ordenaremos el retiro de estos productos”.

El servidor público confesó que no sabe si el organismo que dirige tiene facultades para ordenar el retiro de estos productos, pero comentó que en los próximos días esta situación quedará totalmente definida.

En entrevista, el responsable de la Cofepris aseguró que la industria tabacalera está fuera de la ley.

Incluso, denunció que las tabacaleras crearon más inventario de sus productos —que son los que actualmente se comercializan— antes de la disposición que las obligaba a incorporar imágenes y mensajes, “para tener más tiempo sus cajetillas sin pictogramas”.

“Creímos en la buena fe de las tabacaleras, nos dijeron que no habían hecho inventarios de más, y sí lo hicieron, y les dimos lo que restaba del año para que los terminarán”.

“Yo he querido no caer en más provocaciones con la industria, pero toda vez de que nos provoca, entonces ordenaremos el retiro de sus productos. No hemos definido días por el análisis jurídico que se está concluyendo, pero una vez terminado, no tendrán plazo”.

Alertó que las cajetillas sin pictogramas que circulan en el mercado, “se trata de tabaco viejo y no fresco”, por lo que llamó a la población a no comprarlos, porque son productos caducos.

Pese a esta irregularidad, afirmó que 80% de las cajetillas de cigarros que se comercializan en el mercado mexicano ya cuentan con estos pictogramas.

Dijo que en algunas visitas de verificación que realizaron a las cigarreras, se corroboró el inició de la fabricación de los productos con pictogramas.

“Ya vamos en la segunda versión de los pictogramas, que implica que cuatro imágenes estén ya en circulación; muy pronto serán seis y al finalizar el año serán ocho”, expuso el entrevistado.

Organizaciones civiles denunciaron que en México todavía circulan cajetillas de cigarros que no cuentan con los pictogramas y las leyendas precautorias, tal y como lo establece la Ley General para el Control y el Tabaco, así como su reglamento.

A cuatro meses de que entró en vigor el acuerdo secretarial que obliga a la industria tabacalera a que todas sus cajetillas que venden en México tengan incluidas imágenes y advertencias sanitarias, “se ha detectado que no todas las marcas los portan”.

Dijeron que marcas de cigarros como son Marlboro, Camel y Delicados siguen vendiéndose sin pictogramas en tiendas como Oxxo, 7-Eleven, Extra, Círculo K, etcétera.

Cabe recordar que la Secretaría de Salud (Ssa) otorgó una prórroga de tres meses a las empresas tabacaleras y como fecha límite el pasado mes diciembre de 2010, para que agotaran los inventarios y las cajetillas que ya habían distribuido previamente.

La dependencia prometió que para enero de 2011, todas las cajetillas de cigarros deberían contener los pictogramas y la advertencia sobre los riesgos que ocasionan a la salud.

La ley prevé sanciones de cuatro mil hasta 10 mil veces el salario mínimo general vigente por transgredir las disposiciones, es decir, de 229 mil 840 pesos hasta 574 mil 600 pesos.

En el país fallecen 65 mil personas a causa de las enfermedades que provoca el consumo de tabaco, lo que generan gastos en salud por 45 mil millones de pesos anuales. En México se venden 50 mil millones de cigarros, lo que ubica al país en el lugar 16 de consumo.