María Elena Medina Mora, directora del Instituto Nacional de Psiquiatría, anunció que el programa integrará campañas masivas para conocer los efectos de la enfermedad y estrategias en los centros de salud para prevenir el desarrollo del alcoholismo.

"La idea es poder seguir los pasos del tabaco, el problema que tenemos es que el tabaco ya se reconoció que afecta a la salud y que es malo y hay que dejarlo, y en el alcohol hay mucha negación.

"La estrategia incluye prevención de accidentes, que es uno de los temas de mortalidad muy importante; la intervención breve, que quiere decir que si nosotros podemos detectar a una persona que está teniendo problemas con su manera de beber, pero todavía no desarrolla una dependencia severa, podemos reeducarla y podemos enseñarle a que maneje el alcohol y no desarrolle una dependencia", explicó en entrevista.

Indicó que el alcohol es el primer factor de riesgo para la salud en el país, debido al nivel de consumo de los mexicanos. De igual forma, provoca muchas muertes a causa de accidentes, incidentes violentos o incluso por cirrosis hepática.

"Nosotros tendemos a abusar del alcohol, tenemos un patrón de consumo muy diferente a otras culturas, en otras culturas se pueden beber una o dos copas de alcohol con las comidas, nunca beber más de eso, y entonces puede hasta tener un efecto protector para la salud, con la condición de que nunca haya un episodio de beber como nosotros --que son grandes cantidades por ocasión de consumo-, porque entonces la muerte por accidentes y violencia borra el beneficio que puede tener el consumo moderado.

"¿Cómo podemos contrarrestar eso? Una parte es con quienes son alcohólicos y otra con quienes tienen accidentes, muchos de ellos no son alcohólicos, simplemente bebieron cuando no debían de hacerlo,

"(En cuanto a) los suicidios, México es uno de los países con más altas tasas de crecimiento de suicidio, y el abuso del alcohol juega un papel muy importante en la manifestación de problemas mentales", advirtió.

Medina Mora señaló que uno de los problemas más graves en torno al abuso del alcohol es la falta de opciones de rehabilitación, pues se estima que apenas 25 por ciento de los alcohólicos llega a tratamiento