El exceso de negocios con venta de alcohol en el que ha caído la ciudad en los últimos tres años y el consumo de bebidas embriagantes sin control en la vía pública son reflejo del desorden y ausencia de regulación por parte del Municipio, criticaron ayer empresarios de Mazatlán.

Los líderes empresariales coincidieron en que, aunque es bueno que se abran nuevos negocios en general en la ciudad, en el caso de venta de alcohol se debe revisar a detalle, sobre todo porque se están saturando ciertas áreas con este tipo de establecimientos, sobre todo las colonias populares.

"Desde luego somos propulsores de la libre empresa, pero de alguna manera creo que también como sociedad debemos tener precaución; es un tema muy delicado (ubicación de expendios de alcohol)", consideró Valeriano Suárez, presidente de Coparmex.

No se trata de limitar a los negocios, añadió. Se trata de que haya una vocación en Mazatlán de un desarrollo sustentable con responsabilidad social; buscar en los jóvenes interesados en emprender una empresa nuevas ideas y oportunidades, que abran lugares que aporten valores.

"Creo que sí debemos de hacer un esfuerzo, y que venga empujado por las autoridades porque son los que más pueden inicidir en ese tema, de fomentar el desarrollo de empresas con responsabilidad social", expresó Suárez.

El dirigente de la Canaco local, Guillermo Romero Rodríguez, opinó que sólo son justificables aquellos negocios autorizados como restaurantes, hoteles o supermercados para vender alcohol cuando generen empleos en Mazatlán y no atenten contra la seguridad de los alrededores.

"Es en las colonias populares donde se debería de tener un mayor control para que no se exceda en el número de locales con venta de bebidas, porque no generan beneficio y en cambio sí inseguridad por el consumo excedido", expresó.

"Las cartas de opinión favorable son justificadas, siempre y cuando sean para inversiones como restaurantes, hoteles o supermercados con venta de alcohol que sabemos que generan empleos en las zonas en que se establecen".

El presidente de la Asociación de Hoteles Tres Islas, José Ramón Manguart, puntualizó que es responsabilidad del Ayuntamiento no sólo dar las cartas de opinión favorable para que se abran negocios que venden alcohol, sino también regularlos en cantidad y por zonas.

"Nosotros hemos insistido en que una de las cosas fundamentales es que no se sature el mercado en ciertas áreas y cuadras de zonas turísticas donde ya hay súperes, por qué seguir autorizando más", agregó, "es solo cuestión de armonía y de apreciación".

Los empresarios coincidieron en frenar el desorden que genera el permitir que se consuman bebidas embriagantes en la vía pública, sin que se aplique el Bando de Policía y Buen Gobierno, donde se señala que está prohibido.

"Una de las cuestiones que yo veo que se debe de regular los horarios y la tomadera en la calle, porque en la vía pública está prohibido tomar, así como está prohibido ir a 100 por hora por el malecón, también se debe de aplicar el reglamento para que no usen la calle como baño, bailen y pongan en peligro a los que manejan por ahí", dijo Rafael Rivera López, presidente de la Asociación Mexicana de Empresas para la Atención de Cruceros Turísticos.

El líder de la Coparmex exigió que el Ayuntamiento aplique el programa Cero Tolerancia para lograr el orden en la ciudad.

"Le pedimos de manera muy particular a la administración municipal que establezca el programa de Cero Tolerancia y el Bando de Buen Policía y Gobierno", expresó. "No da una buena imagen de la ciudad, al destino; el Bando de Policía y Buen Gobierno y Cero Tolerancia es un sacrificio que tenemos que hacer como sociedad, pero que va a rendir frutos y va a permitir vivir al turista con una mayor calidad de vida.

"La ciudad está desordenada, no está cumpliendo la administración en este momento con establecer ese orden que no es fácil y donde tenemos que poner de nuestra parte porque cuando tienes una administración permisiva y una sociedad comodina puedes saltarte las normas".