El especialista explicó que el 10 por ciento de los adictos tanto de alcohol y tabaco empezaron desde los 12 años de edad, sin embargo reconoció que debe de haber mucha más gente en las mismas condiciones pues de acuerdo con recientes encuestas, este fenómeno se ha visto en aumento.

“En Fresnillo tenemos 15 consultas por semana, o sea 720 al año, de las cuales 72 de las personas que están tratándose contra adicción confesaron haber empezado a los 12 años de edad, e incluso algunos a más corta edad”, precisó.

El responsable detalló que el fumar y beber alcohol a corta edad tiene repercusiones graves, pues dijo que alguien que consume estos estupefacientes siendo menor de edad durante cinco años, llega a acortar de 8 a 10 años su tiempo de vida.

“Tenemos lo que es el índice tabáquico, que es un examen que hacemos para determinar el riesgo que puede padecer una persona de sufrir alguna anomalía; por ejemplo, alguien que fuma dos cajetillas diarias por cinco años está en riesgo de padecer cáncer de pulmón, sin embargo es más probable que esté en riesgo por cáncer de faringe o de lengua”, comentó.

Además agregó que los padres permisivos, los hogares divididos, las malas amistades y el mal ejemplo, son factores que propician a que el niño comience a fumar o beber alcohol, “el problema es porque los padres fuman o toman frente a sus hijos, o bien algunos los influyen dándoles trágicos, como se dice, para que la pruebe, otra problemática son las malas influencias por parte de amigos”.

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