De acuerdo con los datos del IMSS, al mes de agosto, el empleo formal crece a un ritmo de 4.9 por ciento.

El Presidente Calderón hizo énfasis en el hecho de que el número de empleados formales registrado en el IMSS ya rebasó el máximo previo a la crisis de 2008.

Y, efectivamente, los trabajadores asegurados totales fueron 14 millones 515 mil personas al término del mes pasado, mientras que en octubre de 2008 (fecha en la que se había alcanzado el máximo anterior), la cifra había sido de 14 millones 475 mil.

El dato incluye asegurados permanentes y temporales urbanos.

Una y otra vez le he dicho que para darles una adecuada perspectiva a las cosas, hay que comparar los datos actuales con los de 2008, para quitar el "efecto rebote" que con tanta frecuencia se presenta tras una recesión profunda.

Si la comparación es contra el mismo mes de 2008, entonces en lugar de una tasa de 4.9 por ciento, el crecimiento es apenas de 0.9 por ciento.

Y, si vamos más allá y revisamos el saldo del empleo en el sexenio, comparando contra agosto de 2006, tenemos un alza de 6.7 por ciento, que significa una tasa de crecimiento medio anual de 1.6 por ciento.

Quisiéramos que fuera de otra manera, pero la realidad del empleo es esa.

No es extraño que tengamos ese ritmo de generación de empleo formal, que implica en promedio 230 mil nuevas plazas por año.

Lo explica el crecimiento medio de la economía, que aun si este año llega a 4.5 por ciento, para los primeros 4 años del sexenio será apenas de 0.6 por ciento promedio anual.

De hecho, si en lugar de ver el empleo total, vemos sólo el de carácter permanente, la tasa resulta de únicamente 1.2 por ciento.

Independientemente de cómo se mida, el hecho es que tanto el crecimiento de la economía como la generación de empleos han estado muy por abajo de las necesidades reales del País.

Sólo le recuerdo, en los últimos 4 años, la Población Económicamente Activa (PEA) creció en México en 3 millones 562 mil personas, según el Inegi. Los empleos formales generados en el mismo lapso son 917 mil.

Si quisiéramos que el empleo generado fuera en el sector asalariado formal, "nada más" nos estarían faltando algo así como 2.8 millones de puestos de trabajo.

Y eso que el hecho de que muchos ya ni estén buscando trabajo y otros se hayan ido a Estados Unidos incluso subestima el crecimiento de la PEA.

Así que hay que andar con pies de plomo cuando se pretende convertir el desempeño del empleo en signo de éxito económico de esta Administración.

Si así fueran las cosas, no habría necesidad de empujar una reforma laboral que, por lo demás, no acaba de cuajar.

De hecho, de acuerdo con lo que han señalado los priistas, el tema no está en sus prioridades legislativas.

Y mientras Beatriz Paredes esté al frente del PRI, la voz cantante en la materia la tendrán los legisladores del sector obrero, que lo último de lo quieren saber ahora es de la reforma laboral.

Más valdría a los funcionarios públicos guardar mesura cuando hablen de los logros en materia de empleo porque si se ven las cosas con detalle, el Gobierno no sale bien librado.

Saldos laborales

(Miles de personas)

Variación del empleo formal Variación de la PEA Saldo

2006 617.0 1,214.7 -597.7

2007 529.2 1,174.7 -645.5

2008 -29.6 -443.4 413.8

2009 -171.7 1,863.7 -2,035.4

2010* 473.8 95.8 378.0

*datos al primer semestre

Fuentes: IMSS e Inegi