Manifestó que hay dos puntos que deben tomarse en cuenta, en caso de permitir el acceso a esos lugares a partir de los 16 años de edad, que son controlar la venta de alcohol y el diseño de políticas públicas que eviten el aumento en el consumo de bebidas embriagantes en este sector de la población.

El presidente de la Comisión de la Familia en la LVI Legislatura enfatizó que la familia seguirá siendo un factor determinante para que los jóvenes orienten su comportamiento a un consumo responsable.

El legislador local del Partido Acción Nacional (PAN) resaltó que en el país hay alrededor de 211 mil 586 jóvenes de entre 12 y 17 años que debido al consumo de alcohol han desarrollado problemas con su familia.

Enfatizó que esto representa el problema más constante en este grupo de edad, en relación con el consumo de bebidas alcohólicas, que es de 9.5 por ciento.

“Para Querétaro, las variables y los indicadores de

prevalecía de alcohol en la población permiten afirmar que la situación no es color de rosa, por lo que deben ser tomados en cuenta”, expuso.

Martínez recomendó trabajar para evitar la continuidad del consumo excesivo de alcohol en la entidad, que tiene altos porcentajes a nivel nacional, por lo que habrá que reflexionar la posibilidad de que jóvenes menores de edad puedan acceder a los antros.