Para determinar cuáles de estos están funcionando en regla, cuales son usados por el titular, pues son intransferibles y no heredables, cuantas sanciones o violaciones al reglamentos llevan o si tienen reporte de quejas de los vecinos.

“Buscar la forma de regularizarlos, que paguen el refrendo, se ponga al corriente, que no haya quejas, tenemos una estadística de que 1 mil 971 establecimientos están pagando su refrendo, permisos activos, el resto no está pagando su refrendo”, dijo la alcaldesa Clara Luz Flores Carrales.

Aunado a ello y luego de que los permisos eran una hoja o un cartón con datos, ahora se busca que sean hechos en un material que pueda ser inviolable, con foto impresa del titular, plastificado y con código de barras.

“Para que el inspector pueda ir y verificar el establecimiento con el permiso y ahí mismo darse cuenta si (faltas) ha tenido reincidencias, si es la primera vez, si no ha pagado el refrendo, identificarlo, como medida de control, para tener la certeza de que los inspectores estén haciendo su trabajo”, señaló la munícipe.

La medida de regularización tendrá una duración de nueve meses, concluyendo a más tardar en marzo del 2011; durante ese tiempo, serán verificados físicamente los más de 2 mil establecimientos.

“Ya llevamos una parte avanzada, pero tenemos que concluir con la visita de los 2 mil 685 y aparte, de ahí pasáramos a Cabildo todos los (permisos) que se van a ir dando de baja, por violación al horario, reincidencia, ya no vivo el titular entre otras causas”, comentó.

Permitiendo con esto transparentar el padrón, al poder concentrar los datos, teniéndolos disponibles a la ciudadanía. (NLG