Benjamín Lara aseguró que al ver la situación en Celaya “realmente yo no hubiera venido, si no hubiera visto esta clase de discriminación que está habiendo en este municipio de Celaya, la cual no hay en ninguno de los que hasta ahorita tenemos agremiados en todo el estado”, señaló.

Aseguró que con las constantes multas que imponen los inspectores de Fiscalización se agreden tanto los derechos humanos como el derecho que tienen las personas de trabajar.

“Yo veo que aquí las autoridades están coartando ese derecho que tenemos nosotros de desarrollarnos, ojalá, lo pido de veras, que cese ese hostigamiento que le están haciendo a los lugares, a las mujeres que trabajan, porque no es justo que mientras están buscando el alimento tanto para ellas como para sus hijos, llegue un empleado mal preparado, que desconoce a lo mejor las leyes de alcoholes y se ponen a tirar a diestra y siniestra multas arbitrarias que no deben de ser”, dijo.

El líder se dirigió a Roque, a quien le pidió dejar trabajar a los expendedores de alcohol: “Procuramos tener un buen entendimiento entre autoridades y nosotros que somos un gremio, somos una industria, somos generadores de empleo, de un desarrollo tanto social como económico, apelo a su buena conciencia, apelo a que estas gentes en un futuro sean tratadas con mayor benevolencia y las dejen trabajar y las dejen ganarse el pan”, pidió.