La Arquidiócesis Primada de México, que encabeza el cardenal Norberto Rivera, formuló nuevas críticas al gobierno capitalino y a la Asamblea Legislativa del Distrito Federal, por aprobar la ampliación del horario en que pueden funcionar los establecimientos dedicados al consumo de bebidas alcohólicas.

En el editorial de su órgano informativo "Desde la fe", la Arquidiócesis califica de "totalmente ridículos" los argumentos de aumento de puestos de trabajo, estímulo para la economía y superación de la corrupción que, entre otros, esgrimieron los legisladores locales para aprobar la medida.

"Además, aseguran, dando mayores espacios de tiempo, se consume más despacio (¡¡¡???) Y tal vez tengan razón, pues seguramente aumentará el trabajo de los hospitales, la economía de las funerarias y la corrupción de las autoridades policiacas", señala con sarcasmo.

El texto, titulado "sobre sus conciencias", sostiene que en el Distrito Federal "ya estamos acostumbrados a la constante promulgación de leyes irresponsables que atentan contra la vida y contra la dignidad de la persona, promovidas por la Asamblea Legislativa", lamenta.

También, agrega,"estamos acostumbrados a la aprobación de estas mismas leyes por el jefe de Gobierno, quien sin observaciones y sin la prudencia de un auténtico gobernante, las publica inmediatamente para su aprobación".

Por ello, la institución eclesial considera que no es de extrañar que, "en perfecta congruencia con su espíritu inmoral", la Asamblea haya aprobado una "ley criminal" que permite la ampliación de los horarios, de las 3:00 a las 5:00 horas en los establecimientos dedicados al consumo indiscriminado de las bebidas.

El editorial cita la aprobación de leyes, como la de la despenalización parcial del aborto y el reconocimiento a los matrimonios homosexuales para afirmar que les ha llegado el turno a los jóvenes, como "primeras víctimas" de este tipo de medidas irresponsables que propician el consumo desordenado de bebidas alcohólicas.

"No seamos ingenuos, son también esos lugares y esos horarios los más propicios para la venta y el consumo de drogas, precisamente en este tiempo en el que México está herido por el poder criminal de las bandas organizadas de narcotraficantes.

La Arquidiócesis acusa a los legisladores de atender primero al poder económico de "intereses particulares, oscuros e inconfesables", que al bienestar de una sociedad que necesita mayor seguridad y mejores reglas de convivencia ciudadana".

Afirma que, ante la irresponsabilidad de los legisladores, la única alternativa es la responsabilidad de la sociedad, comenzando por los padres de familia, que deberán hacer uso de su prudencia y autoridad para evitar que los jóvenes sean víctimas fatales de estas leyes absurdas.

"A esos legisladores, que sólo se preocupan por atender los intereses de sus inmorales dueños, les recordamos que un día enfrentarán el juicio ineludible de Dios, quien les pedirá cuentas por todas las vidas jóvenes perdidas", advirtió.