En el acto protocolario que tuvo lugar en Casa Aguayo con la participación de la Presidenta del SEDIF, Martha Erika Alonso de Moreno Valle, la representante en México del Centro Internacional en Materia de Políticas sobre el Alcohol, Mariana Guerra Rendón, y la Vocal del Voluntariado de las secretarías General de Gobierno y de Educación Pública, Laura Kuri de Maldonado, Esparza Ortiz se pronunció por sumar esfuerzos, capacidades, competencias y recursos para garantizar el éxito del programa.

Por su parte, la Presidenta del SEDIF, quien firmó como testigo de honor, agradeció el respaldo de las instituciones de educación superior en el estado por sumarse al programa "Cero muertes por alcohol al volante".

Tras señalar la relevancia de una acción concertada entre autoridades, instituciones de educación superior y la sociedad en su conjunto, enfocada a la prevención, el Rector de la UAP afirmó: "Las universidades estamos comprometidas con la sociedad y la formación profesional de los jóvenes, y de nada serviría si esta tarea no se traduce en mejores condiciones de vida para la población".

Es indispensable, dijo, difundir información e impulsar prácticas sanas entre la población, debido a las cifras alarmantes, que registran un inicio a edad temprana en el consumo de alcohol, por lo que los efectos en accidentes, muertes y enfermedades son más dramáticos.

Recordó que desde hace dos años, la BUAP se sumó al programa "Cero muertes por alcohol al volante", por lo que ya registran avances en este esfuerzo al contar con capacitadores: jóvenes que imparten talleres prácticos y vivenciales a otros para sensibilizarlos y concientizarlos sobre los efectos negativos del mismo.

"La población joven es la más propensa a riesgos por su consumo, por ello es indispensable que se atienda a este sector y el programa incida en instituciones de educación superior, maestros y padres de familia, en todos los que formamos parte de la preparación de los jóvenes", comentó.

De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud, el alcohol representa el quinto factor de riesgo de muerte prematura. Asimismo, según datos difundidos en un video durante la ceremonia protocolaria, cada año mueren en el mundo 1.2 millones de personas por su consumo.

En el país, el promedio de edad en la que se inicia es de 16 años y uno de cada diez declara ingerirlo cada semana. En Puebla, hay 500 mil jóvenes entre 15 y 29 años que han aceptado haber tomado bebidas embriagantes.

En su participación, Mariana Guerra Rendón, representante en México del Centro Internacional en Materia de Políticas sobre el Alcohol, refirió que Puebla tiene una población creciente de jóvenes, como grupo vulnerable de sufrir accidentes por sus efectos.

De acuerdo con estudios, dijo que casi el 70 por ciento de los jóvenes de la zona metropolitana de Puebla, entre 16 y 29 años de edad, ha declarado haberlo probado, y más del 50 por ciento reconoce que ha manejado un vehículo después de haberlo ingerido.

En México se estima que al año se registran 11 mil accidentes automovilísticos relacionados con su consumo; de éstos, 60 por ciento son jóvenes los que conducen.