consumidor y el consumo podría disminuir, porque de por sí ya paga un impuesto el consumidor, sostuvo.

Ante este escenario previo un impacto en el consumo interno y un auge en las exportaciones gracias a que no tienen que

pagar impuestos los consumidores.

En tanto, el precio de los cigarros podría incrementar 10 por ciento para 2010, luego de que se pretende gravar con 80

centavos por cajetilla de 20 piezas.

Ronal Ridderbeekx, director de asuntos corporativos y regulatorios de British American Tobacco México, detalló que

siempre que se incrementa el precio se detona el mercado ilícito, ya que el fumador no deja de consumir el producto, sino

que lo sustituye por un precio más económico.

El gobierno sabe del riesgo y lo reconoce, no obstante, sigue incrementando los impuestos al sector, señaló.

El consumo podría disminuir 4 por ciento de un total de 44 mil millones de cigarros que se consumen en el mercado

mexicano. En los últimos tres años, la industria cigarrera paga un Impuesto Especial Sobre Producción y Servicios (IEPS)

de 160 por ciento, por lo que para 2010, el impuesto del sector sería de 170 por ciento.