Estadísticas del Gobierno Municipal revelan que a partir del mes de agosto, cuando fueron suspendidos de manera definitiva los llamados “operativos anti-ebrios” –por el cúmulo de quejas contra los oficiales–, las detenciones disminuyeron de manera considerable.

Y aunque las autoridades municipales son las responsables de realizar de manera permanente campañas preventivas, las cifras oficiales reflejan que no hay resultados positivos en materia de disminución de riesgos.

“Los accidentes provocados por conductores ebrios aumentó de manera considerable, incluso octubre cerró como el mes con más percances viales provocados por personas influenciadas por el alcohol”, dijo Nora Sevilla, vocera de la DGTM.

Datos de la Oficialía Jurídica y Barandilla establecen que en el presente año fueron turnados ante el Juez un total de 7 mil 506 conductores detenidos en estado de ebriedad, durante el periodo comprendido del primero de enero hasta el 31 de octubre del año en curso. Es decir, en Juárez 25 personas al día son detenidas por conducir en estado de ebriedad.

Además, establecen que hasta el mes de julio el promedio mensual de arrestos oscilaba entre los 800 y mil guiadores alcoholizados, que fue el periodo en el cual estaban vigentes los retenes. De primero de agosto el 31 de octubre fueron arrestadas únicamente 409 personas.

La portavoz aseguró que de momento no está contemplado el reinicio de los retenes. “Los operativos están contenidos por parte de la Dirección de Tránsito”, precisó.

Expuso que durante el mes de octubre se duplicaron el número de choques de personas que conducían en estado de ebriedad al registrarse 57 percances, mientras que marzo reportó 27 incidentes, por lo que fue el mes con menos accidentes viales con personas en estado etílico.

“En lo que va del 2011 un total de 403 personas han chocado al conducir en primero, segundo o tercer grado de ebriedad, provocando un gran número de personas lesionadas y al menos 3 muertes confirmadas por esta razón”, dijo la vocera.

La mayoría de estos accidentes los conductores manejaban en segundo grado de ebriedad. “Se reitera por parte de la Dirección General de Tránsito el exhorto para extremar precauciones con los jóvenes y adultos para actuar con responsabilidad al utilizar otras opciones de traslado en caso de consumir bebidas embriagantes, recuerde que divertirse con responsabilidad evitará tragedias”, advirtió.

De acuerdo al Reglamento de Tránsito una persona que es sorprendida en primer grado de ebriedad es sujeto a una sanción económica de 50 a 60 salarios mínimos (2 mil 991 pesos), de 60 a 70 salarios mínimos (3 mil 598 pesos) en segundo grado y de 70 a 80 salarios mínimos (4 mil 187 pesos) en tercer grado de ebriedad.