Esto es grave, porque si en Sinaloa hay unos 400 grupos de alcohólicos anónimos que atienden a 4 mil en proceso de rehabilitación, ¿cuántos asiduos a la bebida no se preocupan por ello?

Lo resultados negativos se pueden ver en los accidentes automovilísticos frecuentes en la ciudad. Sólo este fin de semana, de viernes a domingo, la Dirección de Tránsito reportó 42 incidentes, entre ellos el lamentable atropellamiento de una familia, donde fallecieron el papá y un menor de 1 año, impactados por un ebrio.

Al menos las personas que gustan beber deben respetar los reglamentos. Que un amigo haga las labores de conductor designado, o definitivamente tomar un taxi. De igual forma, deben mantenerse los operativos antialcohol, los cuales, de acuerdo con las cifras, pueden convertirse en medidas para salvar vidas inocentes.

Ya hemos visto de igual forma las estrategias contra los 'aguajes', lo cual es sano al evitar venta fuera del horario, y la aplicación irrestricta de la ley.

El consumo se está convirtiendo en una situación sanitaria de peligro. Va en aumento, y desde temprana edad. Además, cabe recordar que en algunos casos esta primera adicción puede ser la puerta a muchas otras, de mayor riesgo, como es el consumo de las drogas.

Se debe impulsar, pues, el fomento a "tomar con medida" y la conciencia de las consecuencias de manejar el auto con los sentidos, literalmente, 'embotados'.