'La prohibición de adicionar dichas bebidas con vitaminas y minerales carece de sustento científico y las cargas en materia de etiquetado son discriminatorias, desproporcionadas y arbitrarias,

'Esto debido a que las mismas se basan en el contenido de cafeína, que es similar a una taza de café, producto ampliamente consumido en México', describe el diplomático en el texto.

Indicó que el gobierno de Austria también está preocupado pues no parece que se busque regular una categoría de bebidas o alimentos, sino más bien un producto o una marca en particular.

Ello debido a que se usa 'la fórmula de la bebida producida en Austria para definir a la bebida adicionada con cafeína', y se imponen barreras no arancelarias a su importación y venta, a pesar de que en México hay otras bebidas similares que no califican en esta definición, agregó

El embajador de Austria sostuvo que existen estudios y opiniones que demuestran que el consumo de cafeína no representa un riesgo para la salud, y que las sustancias presentes en esas bebidas no afecta la salud humana.

Por ello, indicó que el gobierno de Austria está dispuesto a proporcionar a los legisladores la información de las autoridades sanitarias europeas, que respalda que el consumo de estos productos no constituye un riesgo para la salud.

Längle advirtió al Senado que de aprobarse esta minuta sin que haya sido objeto de una disposición y valoración científica, se violaría el acuerdo comercial vigente entre México y la Unión Europea.

Por su parte, el presidente del Senado, José González Morfin, restó importancia al asunto, e informó que la misiva del embajador de Austria fue turnada a las comisiones que analizan dicha minuta.