¿Sabias que?...Cultura del alcohol

Última actualización [27/03/2012]



¿Es bueno el alcohol para la salud?

Dra. M. Carmen del Río

ESPAÑA

En los últimos años han sido objeto de atención, en especial en los medios de comunicación, los posibles beneficios del consumo de alcohol, y en particular si es cardiosaludable o no. ¿Es bueno el alcohol para la salud?, ¿si bebemos alcohol no vamos a sufrir infarto?, etc. Estas y otras son preguntas que frecuentemente se nos plantean.

El consumo de alcohol es un hecho que se produce en casi todas las sociedades, sin embargo los patrones de consumo de bebidas alcohólicas varían (cómo, cuánto, dónde se bebe, etc.), formando parte del contexto sociocultural de los diferentes países. O dicho de otra manera, en cada cultura se bebe de manera diferente. En nuestra sociedad el consumo de bebidas alcohólicas de manera regular se asocia de algún modo al disfrute del tiempo libre, y fomento de las relaciones sociales.

Por otro lado, España es uno de los países de la Unión Europea, y del mundo, con mayores índices de consumo de alcohol y donde los problemas relacionados con el alcohol tienen una gran importancia por lo frecuentes que son. Lo que diferencia nuestro país y el entorno social de la mayoría de los países, es que tal y como se acaba de señalar, el consumo de bebidas alcohólicas es un hábito social y existe una gran tolerancia y permisividad hacia su consumo, siendo difícil aceptar que el consumo de alcohol pueda producir problemas (familiares, sociales, médicos, etc.), y cuando estos aparecen existe una negación y gran tolerancia hacia ellos.

 

Lo que más se ha estudiado y se conoce son los efectos perjudiciales del alcohol. De hecho el consumo de alcohol es una de las principales causas de mortalidad. En nuestro país seis de cada 100 fallecimientos se producen por el alcohol, aunque la mayoría mueren como consecuencia de la patología orgánica (infarto, hipertensión, etc) y psiquiátrica que produce su consumo continuado.

Pero en los últimos años se ha producido un enorme interés por conocer los posibles efectos beneficiosos que sobre determinadas enfermedades, sobre todo de tipo cardiovascular, pudiera tener el consumo de bebidas alcohólicas. Algunos estudios de tipo epidemiológico han puesto de manifiesto estos posibles efectos beneficiosos del consumo moderado de bebidas alcohólicas

 

En Europa las enfermedades cardiovasculares suponen mas del 50 por ciento de las causas de muerte y más de la mitad de ellas son debidas a enfermedad coronaria y a accidentes cerebrovasculares.

En España al igual que en Francia, la incidencia de enfermedad coronaria es mas baja que en otros países europeos a pesar de que el consumo de grasas saturadas [grasa "malas", las buenas son las insaturadas] es similar a la de otros países. Esto es lo que se ha denominado como 'paradoja francesa'.

Por otro lado, numerosos estudios han puesto de manifiesto que aquellas personas que beben cantidades moderadas de alcohol, entre 10 y 30 gramos de alcohol al día, es decir entre una a tres copas de vino o de una a tres cervezas al día, tienen un menor riesgo de tener una enfermedad coronaria que las que no beben nada. Es en estas personas en las que existe un menor riesgo de mortalidad cardiovascular.

Así mismo el consumo de cantidades mayores de alcohol tampoco supone un beneficio claro puesto que aumenta la mortalidad por otras causas relacionadas con el alcohol (accidentes, determinados cánceres, etc.)

También es importante destacar que estos efectos beneficiosos que puede tener el alcohol solo se producen en determinados grupos de personas de edad y que tienen un elevado riesgo de padecer enfermedad coronaria. En personas jóvenes, menores de 40 años en el caso de los hombres y de 50 años en el caso de las mujeres no se considera que el consumo de cantidades moderadas de alcohol tenga un beneficio claro, puesto que al igual que en el caso anterior aumenta la mortalidad por otras causas.

 

Los beneficios cardiovasculares del consumo moderado de alcohol están fundamentalmente ligados:

 

  • A un efecto beneficioso arterioesclerótico. Los mecanismos por los que el consumo moderado de alcohol ejerce su papel protector, no son totalmente conocidos, pero según las evidencias actuales parece que estos efectos están unidos a la acción del alcohol sobre las lipoproteínas plasmáticas aumentando el colesterol unido a las lipoproteínas de alta densidad (HDL) [es decir el colesterol bueno] y disminuyendo el unido a las de baja densidad (LDL) o 'colesterol malo' como popularmente se conoce. Esta acción se traduciría en que las arterias en vez de irse poniendo cada vez más rígidas a medida que se va depositando el colesterol en los vasos, permanecerían flexibles.

 

  • A su efecto antiagregante. Uno de los mecanismos de protección cardiovascular está relacionado con la coagulación sanguínea, de tal forma que parece que el alcohol reduce la agregación plaquetaria, retrasando la coagulación sanguínea y la formación de trombos. Es decir, la sangre permanece fluida y puede circular fácilmente por los vasos sanguíneos

 

Aunque se está debatiendo continuamente las posibles diferencias de las distintas bebidas alcohólicas en relación al posible papel protector cardiovascular, en la actualidad no hay suficiente evidencia científica como para afirmar que existan estas diferencias.

Las diversas bebidas alcohólicas difieren tanto en la concentración de etanol como en otros componentes no alcohólicos (azúcares, minerales, vitaminas, polifenoles, etc.) que les confieren un valor nutritivo (un gramo de etanol produce en el organismo después de su consumo unas 7 kilocalorías), y se sabe, a nivel de laboratorio, que los vinos y en especial los vinos tintos contienen altas concentraciones de polifenoles, que les confieren propiedades antioxidantes sobre las LDL, frenando el proceso de la arteriosclerosis. Pero no hay suficientes estudios que demuestren que esto ocurra igual en las personas vivas, aunque sea actualmente una teoría atractiva.

Por otra parte, hemos de tener en cuenta que el consumo de vino está ligado culturalmente a la dieta mediterránea. Junto con el consumo elevado de frutas, verduras, hidratos de carbono y grasas insaturadas, el consumo de vino durante las comidas de forma moderada, se asocia a una menor frecuencia de enfermedades cardiovasculares.

España forma parte de los países productores de vino, es decir que tradicionalmente han producido vinos y los han consumido en parte como un alimento.

 

Por lo tanto, de manera global podemos decir que a pesar de estos beneficios cardiovasculares, que puede tener en algunas personas el consumo bajo-moderado de alcohol, el consumo de bebidas alcohólicas está ligado a otros perjuicios a la salud y que las recomendaciones de tipo médico que se puedan hacer en relación a la ingesta de alcohol siempre deben hacerse con cautela y de manera individualizada. Es erróneo pensar que su consumo, de manera general, es beneficioso para la salud.

Lo que hay que recordar siempre es que existen grupos de personas en los que el consumo de alcohol debe evitarse siempre, independientemente de la edad y de la cantidad, como por ejemplo en las mujeres gestantes, enfermos con alteraciones hepáticas, en personas con lesiones cerebrales, quienes no lo toleran bien, etc.

Para la inmensa mayoría de personas el alcohol aporta un mínimo efecto cardioprotector y sí un riesgo de daño orgánico y psiquiátrico, además de las consecuencias en otros ámbitos (violencia, problemas familiares, etc).

Existen hábitos de vida que no tienen nada que ver con el consumo de alcohol y que están relacionados con un menor riesgo de mortalidad cardiovascular como son el consumo de verduras y frutas, alimentos ricos en fibras, bajo consumo de grasas saturadas, etc. así como la realización de ejercicio físico moderado que es muy recomendable.

 

Dra. M. Carmen del Río

Grupo de Alcohol y Drogas. Departamento de Farmacología y Terapéutica.

Universidad de Valladolid

 

 

FUENTE:      Saludalia/Vivir Sano/Adicciones

http://www.saludalia.com/Saludalia/web_saludalia/vivir_sano/doc/alcohol_y_drogas/doc/aspectos_alcohol.htm#1