Variedades de uvas en Argentina
Variedades de uvas en Argentina
Atlas del vino / Vinos y regiones vinícolas del mundo.
02 Clarke
Blume
1996
En Argentina, parece que todo es grande, distancias, granizo, filetes. La industria vinícola es proporcionalmente igual de grande: Argentina es el quinto prodctor de vino del mundo, con un consumo anual per cápita de 90 litros, aunque muy poca cantidad de vino sale de sus fronteras .
Durante mucho tiempo este entusiasta consumo nacional, la inestabilidad de la economía y una inflación de 5.000 % anual mantuvieron a los vinos argentinos alejados del resto del mundo. Hasta hace poco. Después de una importante reestructuración económica llevada a cabo a finales de los años ochenta, los vinicultores argentinos ya pueden establecer un precio de exportación para sus vinos y empezar a invertir en el futuro. Muchas personas ya han empezado a hablar sobre los vinos y el potencial para elaborarlos que existe en el lado oriental de los Andes.
VARIEDADES DE UVAS
Los conquistadores españoles plantaron primero Criolla, una variedad de uva rosa utilizada para elaborar enormes cantidades de vino blanco, oscuro y oxidado, en 1557. Desde entonces, esta cepa se ha extendido por 1.700 Km. desde el río Negro al sur, hasta el valle de Calchaquí, cerca de la ciudad de Salta, en el norte. La mayor parte de los 14 millones de hectolitros de vino que se producen cada año en el país aún se elabora con variedades como la Criolla, la Torrontes y la Palomino. Si entra en cualquier bodega de Argentina, verá hileras de botellas etiquetadas Borgoña o Chablis; los dos vinos están elaborados con unas mezclas desconocidas.
De las variedades europeas, la negra Malbec, con sabor a regaliz y la madura Syrah, de sabor especiado, muestran el mayor potencial para los tintos. La inmigración italiana trajo variedades como la Sangiovese y la Barbera, pero sus sabores se han unido a las mezclas. Malbec es sin ninguna duda la uva más apropiada para el cálido clima continental, y produce vinos con sabores a moras, ciruelas y especias, nada que ver con el Melbec Francés.
Dentro de las variedades de uva blanca la Sémillon, la Chenin Blanc, la Ugni Blanc y la Chardonnay son las más plantadas en la actualidad, y la última parece encontrarse a la perfección en un clima caluroso. Muchos vinos blancos argentinos se caracterizan por su fruta madurada en exceso y su falta de acidez, pero hay algunas honrosas excepciones, como los que se elaboran en Salta, el valle de Tupungato y Luján de Cuyo.
Las características básicas de los viñedos argentinos vienen determinadas por la influencia de los Andes. Esta barrera elimina toda la humedad de los vientos del Pacífico y propicia unas condiciones meteorológicas muy secas con 320 días de sol anuales, aunque también aportan el agua necesaria para el regadío. El papel más negativo representado por estas montañas ayuda a explicar por qué en la región de Mendoza se atan redes alrededor de las vides. Las tormentas que se forman sobre los Andes hacen que de forma regular y un poco antes de la vendimia caiga un granizo del tamaño de una pelota de golf y esto es todavía peor que las heladas.
A diferencia de Chile, Argentina no tienen barreras naturales que la protejan de la filoxera que ahora se ha extendido por el país, pero que no parece que preocupe mucho a los viticultores. Muchos consideran que los suelos pobres y el riego por desbordamiento mantienen la filoxera a raya. En términos generales, los suelos son áridos y pedregosos con muy poco humus y ofrecen unas condiciones difíciles para las vides.
Aunque Mendoza tiene un clima más apropiado para las tintas, en la región sureña de Río Negro se pueden dar temperaturas más bajas, que posibilitan la producción de vino blanco; la otra región notable en la misma latitud en el hemisferio sur es Gisborne en Nueva Zelanda. El fuerte contraste entre las vides verdes y los huertos de la orilla norte del río Negro, y los secos matorrales de la orilla sur, ilustran su total dependencia de regadío.
Este articulo fué tomado de:
Atlas del vino / Vinos y regiones vinícolas del mundo.
02 Clarke
Blume,
1996
En caso de infringir los derechos de autor, favor de notificarlo al Administrador.
|
