MEXICO

Ante la gran aceptación del mezcal a nivel nacional e internacional, cuyas ventas ascienden a más de seis millones de litros, los industriales mezcaleros de siete estados de la República, que cuentan con la denominación de origen, llevan a cabo la campaña "Siente, Mezcal" para reposicionar a esta bebida como "el coñac mexicano", por su calidad, señaló Roberto Acosta, vicepresidente del Consejo Mexicano de Productores de Mezcal.

Comentó a El Sol de México que en la campaña en la participan los productores de Zacatecas, Oaxaca, Guerrero, Durango, Tamaulipas, San Luis Potosí y Guanajuato, se busca que el consumidor redescubra el mezcal.

Que "sepa que pasamos de la producción tradicional de alambiques" a una más moderna y sofisticada, donde se eliminan todas las impurezas, y "nos quedamos con el corazón del destilado, que convierte al mezcal en uno de los mejores vinos de México".

Se busca eliminar la visión errónea que se tiene del mezcal, como que es malo, afecta la salud, todo ello derivado de que esta bebida que se produce hace más de 400 años en México, para el autoconsumo, asociado a las fiestas tradicionales del pueblo, puntualizó.

"Queremos dar un salto", y para ello se le han inyectado más de 400 millones de pesos en los últimos dos años, para modernizar la infraestructura y el diseño de producto, así como se ha organizado a los nueve mil pequeños productores rurales, poseedores de "fabriquitas, vinatas y alambiques", y se promovió nuevas plantaciones de agave y en muchos de los estados, "para no acabarnos la materia prima en el primer jalón" al llevarlo a cada vez más mercados internacionales, indicó.

Lo anterior, porque señaló el directivo del Consejo Mexicano del Mezcal, esta bebida ancestral mexicana "está teniendo una gran aceptación en el mercado internacional, pues actualmente se vende lo mismo en Nueva Zelanda, que China, Japón, parte de Europa, Estados Unidos, Panamá, Argentina y "estamos haciendo gestiones para llegar a Rusia".

Resaltó que como toda cadena productiva, la industrial del Mezcal, tiene sus problemas, aunque para el Consejo, lo importante es reposicionar el concepto mezcal mexicano en el público consumidor de vinos y licores.

En este contexto, lo que hemos venido haciendo a partir de que México obtuvo la denominación de origen en 1994, a través de una estrategia de organización en la parte productiva en los siete estados a los que beneficia la denominación de origen.

El paso siguiente fue integrar las figuras como el Consejo Mexicano y el Consejo Mexicano Regulador de la Calidad del Mezcal, este último es la instancia que para aplicar y regular la norma oficial mexicana, y llevar a cabo un proceso de organización comunitaria, integrando los consejos estatales que agrupen a las principales organizaciones de productores de maguey hasta la etapa final.

Para finalmente, realizar una estrategia conjunta en los siete estados, que permita posicionar el producto y sensibilizar al público mexicano que "estamos pasando del mezcal tradicional y sin control a un mezcal donde el público tenga la certeza que lo que lleva a su mesa es un producto de calidad apto para el consumo humano.

Acosta, observó que han tomado experiencia de lo que sucedió a la industria tequilera.

Los industriales mezcaleros, dijeron que parte de la organización comunitaria, en los estados, obedece a cuidar el aprovechamiento sustentable; hacer plantaciones nuevas, y evitar lo que pasó con el "boom" tequilero y que el público consuma más de lo que tenemos de planta y se dañe a la industria.

Sin embargo, el entrevistado, aclaró a los consumidores que la industria, pese a su modernización, "no vamos a dejar de producir, de forma tradicional", pues si bien van a aprovechar uso de tecnología, pero "no nos interesa hacerlo a escala industrializada, sino únicamente aprovechar las propiedades básicas del maguey y el mezcal".

La historia y las cifras

La palabra mezcal fusiona las voces metl e ixcalli, que significan en náhuatl "maguey cocido" o "jugo de Agave", se produce en nuestro país desde hace más de 400 años, en el México colonial se le llamó "el coñac de México", de ahí que la aristocracia de ese entonces lo tomara como una bebida muy popular, lo que sigue aconteciendo.

De las 150 especies de maguey registradas en nuestro país, por lo menos 12 se utilizan para la elaboración de esta bebida, y su proceso de elaboración no es sencillo, pues puede durar hasta un mes.

Existen en el país más de 625 fábricas, 80 envasadoras y 150 marcas diferentes, hay más de 330 mil hectáreas de agave en explotación por nueve mil productores, la industria proporciona 29 mil empleos directos e indirectos.

Los precios de referencia en los mercados internacionales en Nueva York son de 25.84 dólares el blanco, de 26.053 dólares con gusano, 30.92 dólares el reposado y de 35.65 dólares el añejo.

Mientras que en California es de 27.85 dólares del blanco, 27.43 dólares el de gusano, 32.82 dólares el reposado y de 37.82 dólares el añejo; en Texas es de 25.96 dólares el blanco, 26.14 dólares el de gusano, 29.52 el reposado y de 35.15 el añejo.

De acuerdo con las cifras proporcionadas por el Consejo, se producen seis millones de litros de los cuales 975 mil son certificados y de ese número 500 mil se exportan a diversos países y el resto se vende en el mercado nacional.

El país que mayores cantidades de mezcal adquiere es Estados Unidos con 232 mil 734 litros, es decir, el 46.7 por ciento, de nuestras ventas al exterior, pero la lista abarca una veintena de países entre los que destacan por su compra Panamá, Australia, Portugal, España, Inglaterra, Nueva Zelanda y Alemania entre otros.