—No se soplar —dice el conductor— nunca aprendí.

—Como si inflara un globo.

—Nunca he inflado un globo.

—Como si apagara una velita.

—Nunca he apagado una velita.

—Exhale pues.

— ¿Cómo es eso?

El diálogo, se lleva a cabo frente a un aparato para medir el alcohol, un alcoholímetro, al cual le acaban de instalar una pipeta recién desempacada para que el conductor al que le detectaron en un filtro de seguridad aliento etílico, sea certificado.

El diálogo se repetirá en al menos ocho de diez conductores, que tras ser llamados a revisión en el filtro, piensan que no hacer lo que les dice el médico, evitará que les confirmen lo que ellos ya saben. Están ebrios y pese a estarlo, conducen un vehículo, muchas veces con acompañantes en el mismo estado que él, otras con su familia y niños pequeños.

Esta noche sin embargo, al confirmar el alcoholímetro su ebriedad incompleta, en lugar de seguir manejando la unidad, será esposado, subido a una patrulla y llevado a las instalaciones de seguridad pública donde quedará detenido hasta que se le baje la borrachera y deje de ser un riesgo para él mismo y para los demás.

Desde finales de diciembre del 2013, los filtros de seguridad en que participan policías, jueces calificadores, médicos, personal de sindicatura y derechos humanos, son una constante los fines de semana en distintos puntos de la zona urbana y la zona rural de Ensenada.

Múltiples accidentes automovilísticos, varios de ellos mortales, fueron necesarios para establecer estos filtros aleatorios, que se ubican en puntos estratégicos para evitar que más personas puedan morir por la imprudencia de un conductor ebrio explica Diana López Bolaños coordinadora de prevención de accidentes del Sector Salud, quien encabeza la brigada.

El Subcomandante operativo de seguridad pública municipal Luis Enrique Ortiz Mendoza explica que la colocación de estos filtros son precisamente prevenir, aunque en el proceso, muchos conductores hacen el berrinche de su vida, porque al determinarse un riesgo por el nivel de alcohol de un conductor, son detenidos y su vehículo remolcado si no hay alguien sobrio para manejarlo y llevárselo.

Pero no es todo, manejar ebrio, tiene un costo para quien lo hace, ya que se convierte en sujeto de multas que pueden sumar mas de 5 mil pesos, por ingerir alcohol a bordo de un vehículo, por conducir un auto estando ebrio y por remolcar un auto.

Son infracciones donde por cierto no hay descuentos agrega el Coordinador de Jueces Calificadores Adán Calderón quien explica que una constante en estos filtros es la presencia de un Juez calificador para determinar si el conductor es detenido.

Este sábado a la medianoche, una hora después de haberse colocado el filtro, cuatro vehículos habían sido remolcados e igual número de conductores detenidos.

Horas antes en El Zorrillo, una de las zonas rurales al sur de Ensenada mas conflictivas por la ingesta de bebidas embriagantes y problemas derivados de este consumo, habían colocado un filtros con alcoholímetro y habían detenido a dos conductores que habían sido trasladados a Ensenada.

La coordinadora de prevención de accidentes del Sector Salud, explicó que para determinar un aseguramiento son varios los pasos.

En un primer momento en el filtro la gente es revisada por los agentes que los exhortan a usar el cinturón de seguridad si no lo tienen abrochado.

Si se detecta, que el conductor tiene aliento alcohólico, arrastra las palabras, o incluso se muestra agresivo se detiene la unidad para que pase a una segunda revisión.

En esta, el conductor deberá ser evaluado por un médico en este caso el doctor Luis Arturo P. Aguilera quien revisa los signos en la persona y luego debe de verificar que el conductor exhale en la pipeta para medir los niveles de alcohol.

Aunque cada persona tiene una resistencia distinta al alcohol de acuerdo a su estatura, peso, condición física, estado de salud, e incluso sexo, una persona que el alcoholímetro tiene una medición de .80 se considera clínicamente positiva por ebriedad incompleta y se pone a disposición del juez calificador.

Este .80 es la cifra en la cual, el conductor debe ser asegurado por su propia seguridad.

¿Cuánto cuestan las multas?

Ingerir a bordo del auto 1,346 pesos

Por sorprenderlo en ebriedad incompleta Y conducir 2 mil 693 pesos.

La grúa de 700 a 1000 de acuerdo a las maniobras.