MEXICO

GlobalMind en conjunto con instancias gubernamentales y académicas presento un estudio sobre la problemática de los accidentes en auto.

Se llevó a cabo la presentación del Sistema de Información sobre Accidentes Vehiculares (SIAV) , un estudio cuantitativo sobre el grave problema que representa en cuestión de pérdidas económicas para el Estado, para los familiares y por supuesto la problemática social que genera el perder un miembro de la familia en un percance de este tipo.

Este es un tema muy importante que en ocasiones se toma a la ligera entre las varias problemáticas sociales existentes en nuestro país pero debemos analizar las muertes anuales que por ejemplo en el 2005 fueron 8,450 hombres y 2,365 mujeres en edades de entre 5 y 30 años. Con lo que se trunca una generación ya sea por la pérdida de un niño o un padre o madre de familia.

Esta cifra lejos de disminuir sigue creciendo siendo el principal motivo el conductor bajo el influjo de alcohol en exceso o drogas con un 78.6% mientras que factores como el estado del camino, fallas en el coche y agentes naturales complementan la estadística. En México el Estado que ostenta el nada agradable primer lugar en accidentes es Nuevo León dejando al Distrito Federal en el noveno puesto. Siendo la mayoría de ciudades al norte las de mayor siniestralidad.

Esto puede ser explicado debido que hacia el norte se cuenta con mayores recursos adquisitivos de la gente y mayor densidad poblacional concentrada en las ciudades. Se dice que los accidentes prácticamente no existen y que la mayoría de ellos son errores humanos y las estadísticas del estudio señalan esto plenamente, pero todo se concentra en la responsabilidad de los conductores primeramente y la permisividad que existe para expedir licencias sin ningún tipo de examen.

Existe poca cultura peatonal, la cual debiera salir del seno familiar por lo que se convierte en un círculo vicioso. Cuando un individuo choca y pierde la vida él es el que tiene "el menor problema" ya que el impacto familiar (aun más si es jefe de familia), los costos operacionales de la defunción, son altos pero si el individuo no muere sale mucho más caro. Suena cruel pero es real y es tan simple la solución pero no la atendemos y es ser responsables como conductores o como padres de familia, un auto es una gran responsabilidad no un premio por terminar los estudios.

¿Las conclusiones del estudio son determinantes?, no, es la respuesta ya que según el Dr. Arturo Cervantes (y con mucha razón) informa que los datos estadísticos de donde se basa el informe son erróneos ya que no existe un censo real de los decesos así como los motivos que los causaron.

Este informe es una punta de lanza que debería ser obligatoria entre todos los Estados de la República Mexicana, a fin de tener datos confiables. Existen diversas políticas pero muchas se siguen quedando en el tintero de la burocracia. Amables lectores de Autocosmos el cambio inicia por uno mismo y por su entorno familiar.