El consumo total de alcohol está disminuyendo entre los estadounidenses, según apunta una nueva investigación. Sin embargo, no parece haber ningún descenso significativo en los desórdenes relacionados con el alcohol. Las conclusiones se derivan de los hábitos de bebida de los 8.600 participantes en el Framingham Heart Study, un estudio multigeneracional de los factores de riesgo para las enfermedades del corazón y otras dolencias crónicas que comenzó a realizarse en 1948. Además de un descenso absoluto en el consumo de alcohol, el doctor Yuqing Zhang de la Escuela de Medicina de la Universidad de Boston y sus colegas descubrieron que los estadounidenses están bebiendo una cantidad significativamente menor de cerveza y más vino, en tanto que la ingesta de alcoholes fuertes se mantiene sin cambios importantes.

Los resutados tamben muestran que los más jóvenes (los nacidos a finales del siglo XX) beben con más moderación que los mayores, y que el consumo de alcohol tiende a decaer a medida que la gente envejece. Según los investigadores, el número de personas que se autodefinen como no bebedores también aumenta notoriamente con la edad.

En el ultimo número de 'The American Journal of Medicine', Zhang y sus compañeros afiman que las conclusiones "pueden considerarse alentadoras en muchos sentidos". El consumo medio de alcohol ha decrecido entre los individuos nacidos hace menos tiempo, el porcentaje de la población que presenta un consumo moderado se ha incrementado de un modo constante y el porcentaje de 'grandes bebedores' ha decrecido con el paso del tiempo.

"No obstante", subrayan, "aunque estos datos sugieren el desarrollo de unos patrones más favorables de consumo de alcohol en la parte final del siglo XX, también muestran que, al mismo tiempo, la incidencia de desórdenes en el uso del alcohol no ha experimentado un descenso, y siguen haciendo falta esfuerzos para evitarlos".

Fecha de publicación: 18.08.2008