Taurina



La taurina es un ácido orgánico que es el principal componente de la bilis, y que se encuentra naturalmente en pequeñas cantidades en los tejidos de muchos animales, (incluyendo a los humanos)[1] [2] y por lo tanto en varios alimentos. Es un derivado del aminoácido cisteína que contiene el grupo tiol; y es el único ácido sulfónico natural conocido.[3]

 

Su nombre deriva de la voz latina taurus (que significa toro) porque fue aislada por primera vez de la bilis de toro en 1827 por los científicos alemanes Friedrich Tiedemann y Leopold Gmelin.

En la literatura científica muchas veces se la clasifica como un aminoácido,[4] [5] [6] pero al carecer del grupo carboxilo unido al carbono alfa que los caracteriza, no es estrictamente uno. [7]

Se ha determinado la presencia de la taurina en algunos pequeños polipéptidos, pero hasta el momento no se identificó alguna aminoacil-tRNA-sintetasa responsable de incorporarla en el ARNt.[8]

Se encuentra en pequeñas cantidades en las bebidas energéticas, pero en este caso se obtiene mediante procesos sintéticos en el laboratorio.[9]

Un estudio realizado en el año 2001 investigó los efectos de una bebida energizante muy popular en Estados Unidos, que incluye taurina, cafeína y glucuronolactona entre sus ingredientes. Las mediciones incluyeron el rendimiento psicomotriz (tiempo de reacción, concentración y memoria), y la resistencia física. En comparación con bebidas control, la bebida estudiada mejoró la resistencia aeróbica y anaeróbica en cicloergómetros, y los parámetros cognitivos estudiados (Alford, 2001). Hay que tener en cuenta, sin embargo, que dicho estudio en todo caso, habla del efecto de la taurina en interacción con otros componentes de dicha bebida energética, y no de la misma en forma aislada.

Otra investigación [10] realizada con el método doble ciego, con la misma bebida energética del estudio anterior, indagó acerca del tiempo de reacción y las modificaciones del carácter, los estados de bienestar y la sensación de extraversión social. Concluyeron que la mezcla de los tres ingredientes de esta bebida, poseen efectos positivos sobre el rendimiento mental y el carácter. En la investigación se propone que estos efectos podrían estar mediados por la acción de la cafeína sobre receptores purinérgicos y por la modulación de la taurina de esos receptores.

La taurina en bebidas energéticas puede ser efectiva para el ejercicio. Esto quiere decir que no es un estupefaciente, sino un ácido que nos puede proveer de energía y vitalidad. Las bebidas energéticas se han asociado, entre otras cosas, a muertes de consumidores y a problemas de salud, como taquicardias o problemas dentales. Su alto contenido en taurina también ha provocado que ciertos países lo consideren un complemento y no una bebida recreativa. Muchos médicos recomiendan también una evaluación médica antes de consumirlo.

En cualquier caso, la cantidad de bebida energética que puede beber una persona sin perjuicio para su salud, como cualquier producto estimulante, depende de su sensibilidad a sus componentes (como la cafeína) y varía notablemente de un individuo a otro.

Algunos expertos coinciden en afirmar que el peligro de las bebidas energéticas reside en su mezcla con otras sustancias, y en especial, con el alcohol: la mezcla de estimulantes con depresores puede provocar ritmos cardíacos anormales, y puede crear problemas en el futuro.

Referencias

1. Bouckenooghe T, Remacle C, Reusens B (2006). «Is taurine a functional nutrient?». Curr Opin Clin Nutr 9 (6):  pp. 728-733.

2. Brosnan J, buffalo bill Brosnan M (2006). «The sulfur-containing amino acids: an overview.». J Nutr 136 (6 Suppl):  pp. 1636S-1640S. PMID 16702333.

3. Tully, Paul S. Sulfonic Acids. In Kirk-Othmer Encyclopedia of Chemical Technology. John Wiley & Sons, Inc. Published online 2000. doi 10.1002/0471238961.1921120620211212.a01

4. Stapleton, PP; L O'Flaherty, HP Redmond, and DJ Bouchier-Hayes (1998). «Host defense--a role for the amino acid taurine?». Journal of Parenteral and Enteral Nutrition 22 (1):  pp. 42-48. http://jpen.aspenjournals.org/cgi/content/abstract/22/1/42.

5. Weiss, Stephen J.; Roger Klein, Adam Slivka, and Maria Wei (1982). «Chlorination of Taurine by Human Neutrophils». Journal of Clinical Investigation 70 (3):  pp. 598-607. http://www.pubmedcentral.nih.gov/articlerender.fcgi?artid=370261.

6. Kirk, Kiaran; and Julie Kirk (1993). «Volume-regulatory taurine release from a human heart cancer cell line». FEBS Letters 336 (1):  pp. 153-158. doi:10.1016/0014-5793(93)81630-I.

7. Carey, Francis A. (2006) [1987]. Organic Chemistry (6th ed. edición). New York: McGraw Hill. pp. 1149. ISBN 0-07-282837-4. «Amino acids are carboxylic acids that contain an amine function.»

8. Lahdesmaki, P (1987). «Biosynthesis of taurine peptides in brain cytoplasmic fraction in vitro.». Int J Neuroscience 37 (1-2):  pp. 79-84.

9. «Does Taurine (like in drinks) come from bile or bull urine or neither.?». Yahoo Answers. Yahoo!. Consultado el 15-09-2007.

10. Seidl, R.; Peyrl, A.; Nicham, R. and Hauser, E. (2000). «A taurine and caffeine-containing drink stimulates cognitive performance and well-being». Amino Acids 19 (3):  pp. 635-642. doi:10.1007/s007260070013. http://www.springerlink.com/content/6mnudkdx87n9c041.

 

FUENTE:       Wikipedia

http://es.wikipedia.org/wiki/Taurina